“No hay una sucesión abierta y no la va a haber en un inmediato futuro”. El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo, ha tratado de frenar este lunes cualquier debate sobre la sustitución de Mariano Rajoy como candidato del PP si finalmente se repiten las elecciones el 26 de junio. Su argumento es que Rajoy es la única persona que garantiza la estabilidad del partido. Su defenestración dividiría al PP y lo abocaría a una crisis similar a la que acabó con la UCD, ha avisado Margallo.
“Rajoy ha hecho una magnífica labor al frente del gobierno de España en estos cuatro años. Es el candidato que ha ganado las elecciones y no hay nadie en el PP a alto nivel que esté discutiendo el liderazgo de Rajoy”, ha asegurado el jefe de la diplomacia española en declaraciones a la prensa a su llegada a la reunión de ministros de Exteriores de la UE.
Para apuntalar la continuidad del presidente en funciones, Margallo ha esgrimido su experiencia personal en la UCD. “Cualquier discusión interna sobre un liderazgo divide a un partido y los que hemos estado en UCD ya estamos suficientemente vacunados contra ese tipo de experimentos”, ha alegado.
A su juicio, cualquier intento de sustituir a Rajoy sería equiparable a las maniobras del PSOE de Felipe González contra Adolfo Suárez para acelerar la disolución de la UCD a principios de los 80. “Cuando el PSOE de la época quiso acabar con UCD, lo primero que hizo es debilitar y finalmente acabar con el liderazgo de Suárez”, ha dicho.
“No creo que sea una experiencia a repetir en estos momentos en que España necesita una gran estabilidad. Necesita un Gobierno estable que esté formado por partidos estables y la estabilidad del PP en estos momentos depende de Mariano Rajoy”, ha insistido el ministro de Exteriores.
La dimisión de Soria no divide al Gobierno
Margallo ha negado además que la dimisión del ministro de Industria, José Manuel Soria, haya dividido al gobierno de Rajoy. Soria presentó su renuncia el pasado viernes por su presencia en los papeles de Panamá y su participación en empresas familiares radicadas en paraísos fiscales.
“Todos hemos dicho más o menos lo mismo: que él reconoce que ha habido errores de comunicación o errores de pedagogía. El ministro Soria sostiene que cuando esos errores se cometen hay que asumir responsabilidades, que su permanencia en el gobierno hubiese podido debilitar la posición del partido, del presidente y del gobierno y que teniendo en cuenta todas estas circunstancias ha presentado su renuncia. Yo creo que todos los ministros estaremos de acuerdo en los puntos que acabo de expresar”, ha asegurado Margallo.