La ikurriña, a la altura de la bandera de Estado Islámico. Tras 'equiparar' ambos símbolos y desatar la polémica, la organización de Eurovisión ha dado marcha atrás y ha pedido a Globe Arena y a AXS que eliminen "inmediatamente" el documento que incluye a la Ikurriña entre las banderas "prohibidas" en el certamen. También ha pedido disculpas "a todo aquel que se sienta ofendido".
Hasta el presidente del Gobierno en funciones ha celebrado la vuelta a la 'legalidad' de la ikurriña compartiendo este tuit con la bandera en el que ha aprovechado para desear suerte a la representante española en el festival de Eurovisión.
Las reacciones políticas han sido unánimes a la hora de criticar la inclusión de la ikurriña en esta lista durante unas horas. El primero fue el mismo lehendakari Urkullu pero hasta el Gobierno, a través del ministro de Exteriores, ha solicitado una "rectificación inmediata".
El jefe del departamento en funciones, José Manuel García-Margallo, ha intervenido directamente para dar instrucciones al embajador de España en Estocolmo respecto de este asunto, al tiempo que han defendido la legalidad y la constitucionalidad de la ikurriña para que conste en la rectificación que esperan.
"Sería un detalle", afirmó el político preguntado por el asunto en Radio Nacional. Afirma Urkullu que este hecho "no solo afecta a Euskjadi" sino al conjunto del país, minutos después de criticar vía Twitter una decisión que "no es de recibo". Por ello, anunciaba en un tuit posterior que su ejecutivo iba a solicitar tanto al embajador sueco en España como a RTVE la corrección de la medida.
Su antecesor en el cargo, el actual presidente del Congreso Patxi López también consideró "absolutamente intolerable e inadmisible" que una bandera que representa a millones de personas de una comunidad autónoma democrática esté en "una especie de lista negra" con otras que, precisamente, representan lo que Euskadi ha "combatido". López "exige" una rectificación ya que, dijo, "espero sinceramente que se trate de un error y se aclare", añadió.
Decisión "antidemocrática"
Javier Maroto, vicesecretario del Partido Popular vasco, recogió buena parte del aire que se respiraba en las redes tras conocerse esta desafortunada analogía.
En la misma línea se manifestaban desde el PNV, que a través de su eurodiputada Izaskun Bilbao ha considerado "una ofensa" para Euskadi y para los ciudadanos vascos la decisión "antidemocrática", que esperan que motive una "disculpa" hacia "todas las personas que lucharon por nuestra libertad y nuestros derechos".
Contra la naturaleza no-política
Entre las 10 banderas que ha vetado Eurovisión está la del Estado Islámico, si bien el resto corresponden a regiones, un epígrafe que las normas señalan claramente como prohibidos en la gala. Son Kosovo, Nagorno-Karabach, Crimea, Palestina, Donetsk, Chipre del Norte y Transnistria. Como sea que las normas apuntan a una suerte de 'derecho de admisión' que deja abierta una posible ampliación, este punto podría afectar por ejemplo a la bandera de la Comunidad de Madrid que alguien pudiera mostrar, por ejemplo, para animar a la participante española, Barei, nacida en la capital.
Sin embargo, la polémica de la lista viene dada por los matices que señalan expresamente a las mostradas. Y es que, bajo el paraguas de la "naturaleza no política del Festival", quedan excluidas las enseñas "locales, regionales o provinciales", así como las que incluyan mensajes comerciales, con contenidos ofensivos o discriminatorios -la bandera gay sí está permitida, por ejemplo-, las que correspondan a entidades "políticas o religiosas" o, y a esto apunta buena parte del documento, a las que representen a territorios en disputa militar o política.
Ni qué decir tiene que la decisión ha generado una reacción en las redes que, mayormente, muestra la irritación de los que se sienten aludidos, aunque otros siempre encuentran motivo para tomárselo con humor.
El inglés, idioma exclusivo
Curiosamente, entre el material que no se ciñe a estas reglas y que podrá ser confiscado -"y no devueltos", aclara la organización- también se incluyen aquellas banderas escritas en otro idioma que no sea inglés. Los palos para selfies, por la posibilidad de obstruir el trabajo de la realización televisiva, tampoco serán bienvenidos.
Además del contenido, también se regula la forma: las medidas de la tela y el asta están estrictamente sujetas a un tamaño predeterminado.