Intelectuales abogan por la segunda vuelta electoral

La gran mayoría de personalidades que ha entrevistado EL ESPAÑOL cada domingo en los últimos seis meses para la sección Hablando sobre España está contrariada por la situación de ingobernabilidad que se ha generado, y una parte muy significativa reclama cambios en la legislación para que algo así no vuelva a repetirse en el futuro.

Ahora hemos vuelto a hablar con dieciocho de nuestros entrevistados para conocer su parecer sobre la necesidad de tener que acudir a nuevas elecciones. Les hemos hecho tres preguntas muy concretas:

1.- ¿Quién tiene la responsabilidad de que no haya habido un acuerdo para la gobernabilidad de España?

2.- ¿Cómo calificaría y qué le parece que tengan que repetirse las elecciones?

3.- ¿Qué medidas cree que habría que tomar para que una situación así no volviera a repetirse?

José María Marco: "Mejor urnas que un gobierno débil"

1.- El responsable más directo desde mi punto de vista es el PSOE. El PP estuvo dispuesto a hacer un gobierno de coalición o a explorar otras posibilidades o apoyos parlamentarios, Ciudadanos también. La clave del asunto es el veto del PSOE al PP, que me parece absolutamente fuera de lugar en una democracia liberal. No había otra solución, y realmente no hay otra solución, excepto gobernar con los nacionalistas, que ahora son independentistas, que es imposible.

2.- En vista del bloqueo no me parece mal: peor hubiera sido alumbrar un gobierno débil incapaz de aplicar políticas estables. Lo ideal ahora era no prolongar este periodo demasiado tiempo.

3.- Se puede poner en marcha una segunda vuelta, se puede cambiar la ley electoral, pero yo creo que estas medidas no reflejan la realidad del asunto, que es que hemos cambiado de ciclo político. Ya no vale negociar como se ha hecho siempre con los nacionalistas, porque los nacionalistas se han hecho independentistas, y los grandes partidos nacionales tienen que encontrar la fórmula de gestionar la idea nacional de un modo distinto de como lo han hecho hasta ahora. Tienen que coaligarse. Lo nuevo de la situación española  no es la exigencia de una ley electoral, la novedad grande es la necesidad del pacto. La clave de todo es una nueva forma de entender la política en España.

Amando de Miguel: "El problema es el odio cruzado"

1.- Responsables son todos, pero fundamentalmente el PSOE, que no ha querido hablar con el PP. El problema es que se odian.

2.- La situación es un desastre. Cuando alguien fracasa en una empresa, lo echan o lo multan.

3.- Cuando el problema se enquista hay que llamar a un independiente. Por ejemplo, De Guindos. Alguien que hable de tú a tú con los líderes europeos.

Antonio Escohotado: "El único imprevisible es Rivera"

1.- Responsable es la clase política. La corrupción ha desmoralizado a este país.

2.- Sólo deseo que lleguen elecciones. Y mi respuesta acaba ahí.

3.- Para evitar situaciones así hacen falta gobernantes menos pringados. El único imprevisible es Rivera.

Antonio García Trevijano: "El responsable, Felipe VI"

1.- ¿Responsables? La Constitución y la Monarquía, Felipe VI.

2.- Para mí, la situación era previsible.

3.- Hay que establecer un periodo de libertad constituyente que desemboque en un referéndum de libertad constituyente en el que se decida la forma de Estado y de Gobierno.

Javier Gomá: "La solución, meter presión social a los políticos"

1.-Los primeros interesados en formar gobierno son los políticos. Si no se ha hecho es porque no se han podido sintetizar las distintas opciones.

2- La política es la armonización de opiniones extremadamente complejas. No es justo que se exija que cada partido renuncie a sus aspiraciones para alcanzar el poder.

3.- La solución es que haya un aprendizaje colectivo en unas segundas elecciones, que por la presión social, mediática y de la opinión pública mueva a los actores a llegar a acuerdos. Pero no hay que excluir que los resultados sean distintos.

Ramón Tamames: "Rajoy debería haberse marchado"

1.-Responsable es el PP por perder votos por la corrupción. Rajoy debería haberse marchado para que un nuevo líder restituyera la confianza en el partido.

2.- Esta situación es el resultado de los personalismos de los líderes que quieren ser presidentes a toda costa, menos Rivera.

3.- La única solución es que 176 diputados sean capaces de votar una gran coalición.

Javier Rupérez: "Segunda vuelta, también en municipales"

1.- Todos. Han demostrado serias incompatibilidades tanto personales como pragmáticas. Además hay que tener en cuenta que por primera vez desde el año 77 tenemos un partido que intenta jugar fuera del sistema, con cierta complicidad por parte de las otras fuerzas políticas.

2.- Mal. Demuestra la incapacidad de las fuerzas políticas de llegar a un acuerdo. También arroja una duda, que espero que se corrija pronto, sobre la eficiencia de nuestro sistema democrático: no se puede pedir a los ciudadanos que se manifiesten continuamente.

3.-A mí me parece que un sistema de elección a segunda vuelta podría ser muy beneficioso. Este sistema es el que tienen en Francia, y permite la concentración del voto y la formación de mayorías. Me parece una buena solución tanto en elecciones nacionales como locales.

Juan Pablo Fusi: "Sánchez se obstinó sin tener mayoría"

1.- No me gusta echar la culpa, pero de tener que decir alguien, probablemente Pedro Sánchez, por su obstinación de formar gobierno sin mayoría evidente.

2.- Yo lo veo con preocupación, no como una tragedia o desastre. Pero con preocupación lógicamente por el gasto, por la situación política creada, la incertidumbre… aunque no somos el primer país que tiene que repetir elecciones.

3.- No conozco todos los reglamentos, pero desde luego habría que cambiar los procedimientos de formación de gobierno, que son larguísimos en España. Ahora se ha demostrado que, tal y como están las cosas, se permite dilatar el problema.

Jiménez Losantos: "La solución: un acuerdo PP, PSOE y C's"

1.-Todos: El PP por querer mantener como presidente a Rajoy y Sánchez por querer ser presidente de Gobierno a toda costa. Yo creo que también es un problema de los partidos, que están indefensos ante la ambición de sus líderes. Si alguien se hubiese opuesto a que Mariano hubiera hecho la política que ha hecho de bloqueo, no estaría en las listas, igual que si alguien se hubiese opuesto a Sánchez, le pasaría como a Carme Chacón.

2.- Me parece inevitable. Hay dos señores que quieren ser presidente del Gobierno y no pueden serlo. La situación piramidal de los partidos españoles hace imposible que puedan cambiar a sus líderes y candidatos, de manera que podríamos incluso tener que volver a votar en octubre o en diciembre mientras Rajoy y Sánchez sigan al frente de sus partidos y no tengan capacidad de asociarse con otros.

3.- Yo creo que lo fundamental es que cambiemos de cultura política. Nos hemos acostumbrado a un sistema básicamente bipartidista, pero ahora, o hay elecciones en segunda vuelta con una elección directa del presidente del Gobierno, o esto se va a eternizar. Porque acostumbrarnos, como tenemos que acostumbrarnos, a vernos con dos o tres partidos, eso va a ser más que difícil. Pero yo creo que la única solución es un pacto de PP, Ciudadanos y PSOE contra Podemos y los separatistas, la ETA incluida.

Daniel Innerarity: "No hay más remedio que pactar"

1.- Se ha instalado el lugar común de que la ciudadanía ha emitido un mandato de ponerse de acuerdo y los representantes no han sido capaces de hacerlo, pero ¿no será que en parte no lo han hecho porque los votantes no estamos aún en condiciones de aceptar las concesiones sustanciales que los líderes políticos deberían haber admitido para que hubiera gobierno?

2.- Es el procedimiento por el cual lo que no era posible en diciembre puede serlo en junio, cuando todos nos hagamos finalmente a la idea de que no hay más remedio que pactar.

3.- No creo que haya ningún mecanismo de ingeniería jurídica o constitucional en virtud del cual se resuelva esa incapacidad de acuerdo que forma parte de nuestra cultura o incultura política. Aquí todo el mundo quiere imponer y esto no tendrá solución mientras no dejemos de detestar al adversario y considerar  que el pluralismo social, político y territorial es un grave inconveniente.

Jon Juaristi: "El PSOE tiene complejo de inferioridad con Podemos"

1.- Sin duda, el principal responsable del fracaso es el PSOE y, muy en particular, su secretario general. Lo peor no ha sido su odio sectario al PP y a Rajoy, sino su complejo de inferioridad ante la extrema izquierda. Me recuerda lo que le pasaba al PNV frente a ETA: tenía que demostrar que eran más nacionalistas que los pistoleros y la única forma de hacerlo era insultar a los constitucionalistas y alejarse de ellos.

La aparición de Podemos habrá dañado al PP, pero al PSOE lo ha laminado. La perspectiva para el día de después de las elecciones no es esplendorosa. Quedará un partido de derecha, todavía grande pero dividido y sin otro programa que permanecer en el gobierno; una pequeña agrupación socialdemócrata bisoña y oportunista  (Ciudadanos); los secesionistas y el bloque de la izquierda bolchevizada, incluidos en ella los restos del PSOE. O sea, el encuentro y la fusión, en una paradoja temporal, de Pablo Iglesias consigo mismo.

La situación no se parece a abril del 31, que, si se pareció a algo, fue a la Transición desde el franquismo a la monarquía constitucional  (una mayoría republicano-socialista identificada con el sistema y una derecha mayoritariamente accidentalista fueron suficientes para el consenso básico; una extrema derecha en minoría y los anarquistas absteniéndose). ¿A qué mes de qué año se parece este mayo de 2016? La pregunta es retórica.

2.- No es para ponerse a bailar jotas, pero prolongar la agonía de esta… ¿cómo llamarla?, ¿legislatura?, sería estúpido y suicida. Sólo conviene a los que desean que el sistema se  hunda lo antes posible.

3.- Introducir una segunda vuelta en los comicios quizá supondría un respiro. Que los españoles votaran borrachos en la primera, si tal fuera su deseo, y que se lo pensaran después durante un par de semanas. Pero creo que, a corto o medio plazo, no evitaría otro bloqueo. Eso, si no sobreviene antes el colapso.

Fernando Savater:"Lo peor hubiera sido el 'pacto de las Fallas'"

1.- Sí somos malpensados, todos… porque ninguno quiere renunciar a su mayor cota de poder; si pensamos en positivo, todos... porque ninguno quiere renunciar a sus principios y programa. Que cada cual elija su respuesta.

2.- Lastimoso, aburrido, caro y de dudosa utilidad. Claro que peor es que hubiera salido adelante el pacto de las Fallas, a la valenciana.

3.- Elegir el presidente de gobierno en segunda vuelta entre los dos más votados y ponerle a pan y agua hasta que logre formar gobierno.

Andrés Trapiello: "El fracaso político lo es también de los votantes"

1.- En principio todos los partidos, pero si no se ha podido hacer una gran coalición es porque uno de los partidos, o uno y medio -no sé si Ciudadanos es un partido o medio partido- han decidido que pueden pactar con todo el mundo menos con Rajoy. Porque no es tanto que no quieran pactar con el PP,  sino que anteponían el nombre de Rajoy al del PP, es decir, anteponían una persona a un programa.

Por lo tanto los que no han querido pactar con el PP, escudándose en que no querían pactar con Rajoy, tendrán más responsabilidad que aquellos que hubieran querido pactar, incluyendo obviamente al PP. Y dicho esto, yo mantengo lo que dijimos los integrantes del colectivo Libres e Iguales, que al día siguiente de las elecciones, el 21 de diciembre, sacamos un manifiesto pidiendo la gran coalición. Una gran coalición hubiera sido posible de no ser por el cerrilismo español, encarnado con mucho orgullo por un Pedro Sánchez que no pudo ser más servil con Pablo Iglesias.

2.- Obviamente es un fracaso de los partidos políticos, pero en cierto modo también es un fracaso de aquellos que votaron de esta manera, es decir, que la gente también se equivoca cuando vota. Si hubiesen votado otras cosas no tendríamos que repetir elecciones. El fracaso de los políticos está hecho a la medida del fracaso de los ciudadanos.

3.- Esto es demasiado técnico para mí, pero supongo que con una corrección de la ley electoral, que fuéramos a un sistema de segundas vueltas, evitaríamos esto. Pero no sé si esto es mejor, si favorece o dificulta una mayor y más justa representación de la gente. Supongo que esto también se corregiría con una educación del electorado.

Insisto en hacer responsable al electorado de aquello que vota. La responsabilidad del votante no acaba cuando suelta su voto en una urna: hay una conexión moral entre él y su voto cuando este ya está computado, y eso es lo que hay que recordarle al electorado. Tenemos estos políticos porque tenemos estos electores.

Había otras opciones que los electores no han votado y que probablemente eran mejores. Estoy pensando en Rosa Díez, que acaba de presentar un libro extraordinario, un verdadero Episodio Nacional, donde cuenta la historia de los últimos ocho años a través de la historia de un partido que no debería haber desaparecido. Y ha desparecido habiendo sido el pionero de todo aquello que los demás le han copiado ocho años después.Así de simpática y generosa es la política española.

Francesc de Carreras: "Todavía no hay cultura del pacto en España"

1.- Sin duda los partidos que han desaprovechado la ocasión de investir presidente, en especial aquellos que no han hecho esfuerzo alguno, como el PP, o se han burlado y puesto en aprietos a sus posibles aliados, como es el caso de Podemos con el PSOE. Pero también hay una parte de opinión pública, incitada por algunos medios de comunicación, que no admite pactos y es intolerante con el adversario, al que considera enemigo.

2.- Es un fracaso del espíritu pactista de ciertos partidos después de proclamar antes de las elecciones que íbamos a una nueva etapa de la vida política española en que la cultura del pacto sería imprescindible. Todavía no hay cultura del pacto en España, ni entre la clase política ni en la sociedad.

3.- No han fallado las reglas jurídicas, ni las instituciones, sino los partidos. Pero el plazo de disolución podría acortarse si los dos meses se empezaran a contar desde el día siguiente a las elecciones o desde el día de constitución del Congreso. Una reforma más radical sería cambiar la ley electoral en sentido mayoritario, de lo que no soy partidario porque creo que, precisamente, lo que se debe hacer es aumentar la proporcionalidad.

Albert Boadella: "Hay un patológico repudio hacia el PP"

1.- La causa principal es el obstinado y patológico repudio que se ha establecido en España hacia el PP. En este sentido, los máximos culpables son el desprecio de Sánchez hacia más de siete millones de españoles y la petulancia de Rivera, exigiendo separar a Rajoy.

2.- Muestra una preocupante ausencia de sentido del Estado en nuestros políticos.

3.- Es muy posible que una segunda vuelta hubiera evitado la repetición de elecciones. En cualquier caso, la segunda vuelta siempre es un mecanismo de seguridad para sintetizar mejor la tendencia general de los ciudadanos.

Fernando Vallespín: "Debería castigarse a los partidos reticentes a pactar"

1.- Culpables lo son todos en alguna manera. El PP, por no poner los medios para encontar una solución "pactable", al enrocarse en el liderazgo de Mariano Rajoy; el PSOE, por las limitaciones a las que estuvo sujeto a la hora de pactar con Podemos y con el propio PP; C's, por su veto a Podemos y viceversa. Sí es cierto, sin embargo, que tanto PSOE como C's fueron los que más impulsaron el pacto, mientras que PP y Podemos en ningún momento estuvieron dispuestos a ceder nada en sus posiciones relativas.

De todas formas, hay otro culpable: la propia previsión de nuevas elecciones, que hizo que la opción de una segunda vuelta les pareciera a algunos actores políticos más ventajosa que las cesiones que se hubieran visto obligados a hacer al entrar en pactos. Nuestra bisoñez en este tipo de prácticas ha salido claramente a la luz.

2.- La repetición de elecciones es un fracaso colectivo. En un país que no ha acabado de superar la crisis, con una agenda política cargada de problemas -Cataluña, competitividad, empleo, etcétera- es impresentable que los partidos hayan atendido antes a lo que consideran sus propios intereses que a los intereses generales de España.

Pero ahí no es donde reside el mayor fracaso. Al impedirse el pacto se frustran las expectativas puestas en la nueva política, en que la aparición de nuevos partidos y nuevas formas de hacer política pudieran acercarnos a otra cosa. Este desengaño puede conducir a mayor desconfianza en las instituciones y a un nuevo divorcio con la clase política.

3.- Medidas, pocas, a menos que cambiemos el sistema electoral por uno mayoritario a dos vueltas. Pero incluso en este último caso, de cara a la segunda vuelta los mejor situados se verían obligados a entrar en pactos con los partidos que no concurrieran a ella para captar los votos de sus electores. O incorporar una prima de escaños al partido más votado, como ocurre en Grecia y se introdujo en Italia para el Senado.

Observemos, no obstante, que nuestros intentos de reforma del sistema electoral van en la dirección opuesta: se está apostando por introducir una mayor proporcionalidad para evitar los sesgos mayoritarios del sistema actualmente existente. El problema es, sin embargo, la ausencia de una auténtica cultura pactista. Ésta sí ha estado siempre presente en el ámbito local y autonómico, pero no a nivel estatal. Hasta que los partidos reticentes a pactar no sufran un correctivo electoral por su actitud no veo que podamos resolver este problema.

Félix de Azúa: "Sánchez y Rajoy deberían haber dimitido hace siglos"

1.- Sin duda, Pedro Sánchez. Ante el fracaso de su votación debería haber pactado con Rajoy. No hacerlo ha supuesto una pérdida enorme de tiempo, dinero y confianza de los electores. Es un político irresponsable y narcisista.

2.- Catastrófica. Tanto Sánchez como Rajoy deberían haber dimitido hace siglos. Rajoy por estar al frente de un partido corrompido. Sánchez por no aportar ni una sola idea socialista.

3.- Exigir a los profesionales de la política por lo menos un título universitario.

José María García: "Tenemos demasiados saltimbanquis de la fama"

1.- Los responsables son dos: Mariano Rajoy y Pedro Sánchez, y no hace falta que cambie el orden.

2.- La falta de acuerdo es la demostración más clara de la ineptitud, desconocimiento y egoísmo de nuestros dirigentes.

3.- La forma de evitar que algo así vuelva a repetirse es que los españoles, cuando depositemos el voto, seamos conscientes de nuestra responsabilidad, porque luego vienen estas penosas y gravísimas consecuencias. Lo que no puede ser es que la política esté llena de predicadores, vendedores de crecepelo y saltimbanquis de la fama.