"Queremos que esta campaña sea honesta. Hay una pregunta que toca responder: con quién pactar, qué gobierno queremos". Este ha sido uno de los principales mensajes que ha expresado Pablo Iglesias en su entrevista de esta mañana en El programa de Ana Rosa (Telecinco). El líder de Podemos ha alentado las esperanzas de su alianza con Alberto Garzón para el 26-J. Y, entre otras cosas, ha insistido en pedir un referéndum en Cataluña.
En la primera parte de la entrevista Iglesias se ha centrado en responder a preguntas sobre su más que probable alianza con Izquierda Unida para la próxima cita con las urnas. Una cita en la que, según ha dicho, Podemos "sale a ganar". "Para nosotros el 'sorpasso' no es superar al PSOE, sino al PP, porque el PSOE es un aliado", ha explicado.
Para lograr esa victoria en unas elecciones que ha calificado otra vez de "segunda vuelta", Iglesias confía en su alianza con Unidad Popular-IU. "La gente de IU y de Podemos desean mayoritariamente el acuerdo y debemos caminar en esa dirección", ha afirmado. Y también apuesta por continuar con sus confluencias en Galicia, Cataluña y Valencia. Tras las elecciones, llegará el tiempo de los pactos. Iglesias tiene claro que "lograremos un gobierno progresista con coalición de izquierdas". Pero, eso sí, para que la campaña sea "honesta", cada partido debería aclarar en campaña con quién quiere pactar después del 26-J, según ha remarcado.
"Me equivoqué con la cal viva"
En otro orden de cosas, Iglesias ha admitido por primera vez que "se equivocó" al atacar al PSOE con la alusión a la "cal viva" en el fallido debate de investidura del pasado marzo. Más en concreto, ha dicho que en su primer discurso hizo una mención a la llamada "guerra sucia" contra ETA que considera "correcta" porque "el pasado hay que evitarlo", pero que en la segunda -en la que aludió a la "cal viva"- cometió un error. Iglesias ha explicado que se dio "una situación de calor en el debate, en la que nos empezamos a calentar en el Parlamento", pero ha reconocido que esa mención "sobraba".
Además de asegurar que sus discrepancias con Íñigo Errejón "nos han enriquecido", Iglesias se ha centrado en reclamar una campaña austera. Podemos propone un gasto por partido que se quede en 3 millones de euros. Y, para ello, también apuesta, como Ciudadanos, por un único envío de papeletas por parte del Ministerio del Interior.
Casi al final de la entrevista, Iglesias ha vuelto sobre el asunto catalán, a preguntas de los informadores. Una vez más, el líder de Podemos ha defendido que España es "un estado plurinacional" y ha abogado por la celebración de un referéndum en Cataluña. "La fraternidad puede construirse desde el reconocimiento", ha afirmado. "Nosotros defendemos la unidad reconociendo la diversidad", ha agregado.