El cardenal arzobispo de Valencia, Antonio Cañizares, vuelve a cargar contra el colectivo homosexual. Dice hacerlo en defensa del "bien precioso de la familia cristiana" y para ello, según sus palabras, es necesario denunciar la "importante escalada contra la familia" por parte de dirigentes políticos que han sido "ayudados por otros poderes como el imperio gay y ciertas ideologías feministas".
Lo ha dicho durante una misa este miércoles, en la que también aprovechó para decir que, con los datos que él maneja, en España han incrementado el número de abortos, las rupturas matrimoniales y las uniones de hecho. Pero Cañizares, no es el único que ha atacado desde el púlpito a los homosexuales. Repasamos los ataques contra "el imperio gay".
1. Reig Pla vincula la homosexualidad con prostitución
El obispo de Alcalá de Henares (Madrid), Juan Antonio Reig Pla arremetió en marzo del pasado año contra los homosexuales y el aborto. Durante el oficio del Viernes Santo de 2015, que fue emitido en directo por La 2 de Televisión Española, asoció la homosexualidad con prostitución y con determinadas ideologías que "corrompen a las personas".
"Quisiera decir una palabra a que a aquellas personas que hoy, llevados por tantas ideologías, acaban por no orientar bien lo que es la sexualidad humana, piensan ya desde niños que tienen atracción hacia las parejas del mismo sexo”, analizó. “Y a veces para comprobarlo se corrompen y se prostituyen. O van a clubes de hombres. Os aseguro que encuentran en infierno”, apostilló.
Cabe recordar que Reig Pla es el autor de un curso sobre "cómo curar la homosexualidad" y "hablar de sexualidad como Dios manda".
2. El PP, "infectado por el lobby gay"
No ha sido la única salida de tono del arzobispo de Alcalá de Henares. En mitad de la X legislatura, acusó al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, de "insensatez" en sus políticas porque, en su opinión, está "infectado" por el lobby gay.
"El Partido Popular es un partido liberal, informado ideológicamente por el feminismo radical y la ideología de género, e infectado como el resto de los partidos políticos y sindicatos mayoritarios, por el lobby LGBT".
Por eso hizo un llamamiento a una "respuesta organizada y capaz de movilizar las conciencias y promover iniciativas políticas que han suya la doctrina social de la Iglesia".
3. El SIDA, "un acto de Justicia"
El presidente de la Conferencia Episcopal de Bélgica, André-Joseph Leonard, en un libro publicado en 2010, generó un gran revuelo primero en su país y luego en toda Europa. Pese a que le advirtieron del revuelo que podrían generar sus palabras, no quiso cambiar un ápice.
El prelado católico con más rango de Bélgica indicó que el sida "es una justicia inmanente" y que "jugar con la naturaleza del amor puede conducir a catástrofes así" alegando la no utilización del preservativo en las relaciones sexuales.
4. El matrimonio gay, igual a "la unión entre un hombre y un perro"
El obispo de Málaga, Jesús Catalá, mantuvo un encuentro en un colegio de la ciudad y respondió a adolescentes que formularon preguntas, entre ellas referidas al matrimonio homosexual.
La respuestá de Catalá en 2014 dejó atónitos a los chavales: "La legislación española sobre el matrimonio es la peor del mundo, porque se habla de "cónyuge 1 y cónyuge 2, que bien podría ser dos hombres, un hombre y un perro o un bebé y un anciano de 70 años".
5. "Señalar que es una deficiencia no es una ofensa"
Sin salir de Málaga, el cardenal de la ciudad, Fernando Sebastián, afirmó en una entrevista al diario Sur, que "señalar a un homosexual una deficiencia no es una ofensa". Y continuó: "Es una ayuda porque muchos casos de homosexualidad se pueden recuperar y normalizar con un tratamiento adecuado".
Tras la entrevista, la Fiscalía provincial de Málaga abrió diligencias de investigación penal por estas declaraciones. En el escrito se acordó incoación de diligencias tras la denuncia interpuesta por la Confederación española de lesbianas, gays, bisexuales y transexuales Colegas.
6. El sexo entre hombres "no puede ser aprobado"
El Obispo de San Sebastián, José Ignacio Munilla, se apoyó, dijo, en la Sagrada Escritura para presentar a los homosexuales " como depravaciones graves”, ya que “la Tradición ha declarado siempre que los actos homosexuales son intrínsecamente desordenados”.
De esta forma, analizó en un libro publicado en el pasado mes de octubre que las prácticas sexuales entre hombres “no pueden recibir aprobación en ningún caso”. Por otro lado, consideró que la masturbación es “una especie de violencia sobre el cuerpo”, porque “pretende arrancarle el placer, sin vivir a cambio la verdad del amor que le da sentido”.
7. Homosexualidad, sinónimo de "sífilis y gonorrea"
Fuera de España, no han sido pocos los obispos que se han pronunciado abiertamente en contra de la homosexualidad. El obispo de Aguascalientes, José María de la Torre Martín, arremetió contra la comunidad al afirmar que sus preferencias sexuales son una enfermedad como la sífilis y la gonorrea.
“La sífilis es hoy una medalla de premio, son honorables y van a ser reconocidos los sifilíticos y los gonorréicos… Oye, espérate, es una enfermedad contagiosa. Eso provoca daños en la sociedad. Así que por más que quieran a una persona enferma, no le pueden decir que está saludable” declaró el representante de la Iglesia católica.
“Son temas que aglutinamos en el valor de la familia. Todos estos temas –aborto, matrimonio entre personas del mismo sexo– son enfermedades de la familia contemporánea; unos más graves que otros, pero es necesario curarlos porque de otra manera la familia perecerá y perecerá la civilización, porque la familia es baluarte” añadió el obispo.