Cuatro directores de El Mundo en menos de dos años y medio. Y el quinto llegará en las próximas semanas. El diario vive momentos de convulsión. Este miércoles el Consejo de Administración de Unidad Editorial anunciaba el despido de David Jiménez, tras solo un año en el cargo, y la elección como sustituto “en funciones” de Pedro García Cuartango, uno de los periodistas más veteranos y respetados del rotativo.
En enero de 2014 los gestores de Unidad Editorial decidieron destituir a Pedro J. Ramírez como director de El Mundo. El elegido para sustituirle fue Casimiro García-Abadillo, hasta aquel momento vicedirector del periódico. Solo un año y tres meses después, a finales de mayo de 2015, la empresa editora del rotativo decidía por sorpresa sustituir a García-Abadillo por David Jiménez, hasta entonces corresponsal en Asia. Este miércoles llegaba el penúltimo cambio, ya narrado, al frente de El Mundo: el despido de Jiménez y su sustitución por Cuartango.
Lo más sorprendente, en este último cambio de timonel, es que García Cuartango llega como “director en funciones”. En su comunicado oficial, Unidad Editorial explica que “la empresa inicia así un periodo de transición encaminado a consolidar una dirección de la cabecera que afronte los grandes retos informativos y el proceso de transformación digital ya iniciado”. En otras palabras, la empresa presidida por Antonio Fernández-Galiano está buscando a un nuevo director para El Mundo.
Se da la circunstancia de que este período de inestabilidad coincide en gran medida con la etapa del italiano Pietro Scott Jovane como consejero delegado de Rizzoli Corriere della Sera Mediagroup (RCS), grupo propietario de Unidad Editorial, editora de El Mundo, Marca y Expansión. Este joven directivo fue destituido por los propietarios de RCS el pasado octubre, ante sus continuos errores en la gestión de conglomerado mediático.
La difusión y las ventas
Los datos hablan por sí solos. En el contexto de la profunda crisis que viven todos los periódicos de España, los cambios al frente de El Mundo no han servido para frenar la pérdida de difusión y ventas de los últimos años. El rotativo de Unidad Editorial cerró 2013, último año completo con Pedro J. como director, con una difusión de 173.507 ejemplares y una venta diaria en los quioscos de 133.140 copias. Este último dato suponía un descenso del 13% respecto a 2012, aunque el porcentaje era del 9% si también se contabilizaban las suscripciones a Orbyt.
En 2014, con García-Abadillo a los mandos, El Mundo acabó con una difusión de 150.000 ejemplares (-13% respecto a 2013) y unas ventas al número de 108.000 (-18%). El año siguiente, 2015, con García-Abadillo durante cuatro meses y David Jiménez otros ocho, los números no fueron mejores: una difusión de 126.690 ejemplares y unas ventas de 89.095, lo que supone descensos del 15,5% y 17,5%, respectivamente. Por último, en los primeros cuatro meses de 2016 la media de El Mundo ha sido de 114.541 copias de difusión y 77.690 ejemplares vendidos, con caídas del 9,5% y el 12,8%.
Además, en los últimos años la edición on line de El Mundo ha perdido el liderazgo en internet frente a su principal competidor, El País, según los datos de Comscore. Asimismo, ha ido perdiendo paulatinamente suscriptores en Orbyt. Esta plataforma de suscripción ha ido perdiendo peso en los últimos años en los planes de la empresa. De hecho, Unidad Editorial decidió dar de baja a Orbyt en la contabilidad de OJD como réplica digital de El Mundo.
Un ERE y tensiones
Estos datos, unidos a la crisis publicitaria del sector, han provocado que la redacción de El Mundo esté inmersa, al igual que el conjunto de Unidad Editorial, en un Expediente de Regulación de Empleo (ERE), que es el tercero que la empresa editora acomete en los últimos diez años. En este caso, la empresa y los empleados han acordado, tras duras negociaciones, un ERE que costará el puesto a 160 trabajadores. El grueso de los despidos serán en El Mundo: 38 periodistas en Madrid y otros 27 empleados de las delegaciones territoriales de diario.
En ese difícil contexto para el buque insignia de Unidad Editorial, este miércoles David Jiménez se despidió de la redacción con un discurso. Y en él se refirió a “corrientes externas e internas que intentan acabar con la independencia de El Mundo”. Palabras enigmáticas que parecían aludir a las relaciones entre los gestores del periódico y el poder político.