"El Director General de la Guardia Civil, Arsenio Fernández de Mesa, ha firmado esta misma mañana, la revocación del destino, en comisión de servicio, que desempeñaba en el puesto de Pozoblanco (Córdoba) el Guardia Civil A.M.G.E.", ha informado el cuerpo en un comunicado este lunes.
La decisión se ha tomado una vez recibido el Auto del Juzgado de Instrucción Nº 4 de Pamplona, dictado en el marco de las diligencias previas 1670/2016 y por el que se decretó su ingreso en prisión provisional comunicada como presunto autor de un delito de agresión sexual y otro de robo con violencia e intimidación ocurridos el pasado 7 de julio.
"La decisión del Director General de la Guardia Civil se basa en que los hechos delictivos que se investigan por la Autoridad judicial, además de por su gravedad, han provocado una importante alarma social, hieren la sensibilidad de los ciudadanos en general y generan un notable desprestigio de la Institución a la que pertenece el investigado, desde hace además pocos meses", reza el mismo escrito.
Fuentes de este cuerpo han explicado a Efe que el agente no perderá su condición hasta que haya sentencia, pero de forma cautelar se le aparta del servicio y se le revoca el destino.
"Avababa de incorporarse"
E l delegado del Gobierno en Andalucía, Antonio Sanz, ha comunicado este lunes a los medios que el implicado "acababa de incorporarse" al servicio y "todavía estaba pendiente de destino".
El agente, que supuestamente participó con otros cuatro jóvenes sevillanos de edades comprendidas entre los 25 y los 28 años en la violación, "había acabado su periodo de formación de manera reciente" y, si se confirman los hechos, se tomarán "las medidas disciplinarias internas", avanzaba Sanz antes de conocerse la noticia de la revocación.
El delegado del Gobierno en Andalucía ha explicado además que el proceso disciplinario interno es independiente del judicial.
El pasado viernes el titular del Juzgado de Instrucción número 4 de Pamplona decretó el ingreso en prisión por varios delitos de agresión sexual de los cinco detenidos, naturales de Sevilla y con edades entre 25 y 28 años, por abusar de una joven en Pamplona, sucesos que los acusados grabaron, al apreciar una "participación colectiva de todos ellos".