El presidente del Gobierno en funciones junto con el presidente de C´s, Albert Rivera.

El presidente del Gobierno en funciones junto con el presidente de C´s, Albert Rivera. Efe

España LA NUEVA LEGISLATURA

Rajoy hará una oferta a la desesperada a Rivera tras el portazo de Sánchez

El líder de C´s se mantiene en la abstención pero el PP cree que aún hay margen para convencerles.

3 agosto, 2016 02:58
El Partido Popular confía mucho más en la reunión que mantendrá este miércoles con Albert Rivera que en la que tuvo el martes con Pedro Sánchez. En el seno del partido conservador creen que pueden empujar a Ciudadanos a que vote sí a la investidura de Mariano Rajoy, no solo a que se abstenga. Por eso hará una oferta a la desesperada a Rivera tras el portazo de los socialistas. Si consigue el respaldo afirmativo de los 32 diputados de C's, "el PSOE se quedaría entre la espada y la pared" y la negociación entraría en una nueva fase, aseguran fuentes conservadoras.
Rajoy le explicará a Rivera que desatascar la situación política depende, en gran medida, de su apoyo afirmativo, ya que, a su entender, "la abstención técnica sigue bloqueando la situación". En el Partido Popular creen que muchos militantes y cargos intermedios de Ciudadanos estarían a favor de que Rivera entrara a formar parte de un gobierno en coalición con los conservadores. "Si deja gobernar a Mariano Rajoy y se queda en la oposición, ¿qué oposición va a hacer, con Sánchez como líder intentando desmarcarse de Pablo Iglesias?", se preguntan en Génova para animar a los de la formación naranja a formar parte de un Ejecutivo liderado por Rajoy.
En la formación naranja no se cierran a abrir y formar parte de una mesa negociadora e intentar desbloquear el 'no' del PSOE. Miembros de C's entienden que "votar que sí a Rajoy por sentido de Estado y que luego el PSOE no se abstenga, aunque sea por la mínima, sería una factura imposible de asumir para nosotros".
Al mismo tiempo que Rivera reunía a su grupo parlamentario para reafirmarse públicamente en su abstención, en el PP y en Moncloa no perdían la esperanza de conseguir ese respaldo afirmativo. "Negociaremos hasta que nos duelan los pies", reconocía durante la tarde de este martes un estrecho colaborador del presidente del Gobierno en funciones. Desde el 26J, cuando el escrutinio arrojó un saldo de 14 escaños más para el PP, los conservadores aseguran que han mantenido reuniones "públicas y privadas" entre miembros de su partido y de Ciudadanos. Y que todavía hay algo de margen para ese cambio, "aunque el panorama es muy complicado".

El perímetro de negociación

De esos encuentros, que se han mantenido prácticamente en secreto, el Partido Popular ha sacado varias conclusiones. Entre ellas, saber hasta dónde pueden negociar con Ciudadanos para arrancar ese anhelado sí. "No le va a pillar por sorpresa ninguna propuesta que se le haga porque ya se ha hablado todo. Sabemos dónde está el perímetro de negociación", reconocen conocedores de esas citas privadas. Por ofrecer, el PP está dispuesto a ofrecer todo excepto la cabeza de Mariano Rajoy que, aseguran, "Rivera nunca se la ha pedido cuando se ha reunido con él".
En Génova recuerdan que al PP y a C's "son muchísimas más las cosas que los unen que las que les separan" y reconocen que unas terceras elecciones les beneficiarían a ellos y perjudicaría "muchísimo" a Albert Rivera. "Si lo que quieren es eso, pues vamos a terceras elecciones. A ver qué capacidad de negociación tienen dentro de cuatro meses", amenazan.

El 'reloj de la democracia'

Rajoy entregará este miércoles a Albert Rivera un documento que recogerá todas las cesiones que el PP está dispuesto a hacer. Acto seguido, desde Moncloa lo enviarán a Ferraz, que todavía no lo tiene por la negativa de Pedro Sánchez a iniciar un proceso de negociación. Tras verse con el líder de Ciudadanos, el líder del PP se reunirá con su comité de dirección en Génova para "valorar en qué punto estamos y ver qué podemos hacer". Ya por la tarde, el presidente del Gobierno en funciones visitará a Felipe VI para hacer su ronda habitual de contactos aunque esta vez la situación sea mucho más excepcional, ya que Rajoy podrá desvelar al rey si es capaz de desbloquear esta encrucijada.
En el PP no quieren desvelar cuál es el límite de tiempo que manejan para que el 'reloj de la democracia' se ponga en marcha hacia las terceras elecciones. De momento, el presidente del Gobierno en funciones tiene el encargo del rey pero ha retrasado su reunión con la presidenta del Congreso para que ponga fecha a una hipotética sesión de investidura. "Me veré con ella, pero antes tengo que despachar con los demás líderes políticos", aseveró. Nadie en el PP descarta que Mariano Rajoy renuncie a pedir la confianza al Parlamento si las reuniones no fructifican. Un tema que, de momento, es tabú para todos.