Los tentáculos del yihadismo en Libia amenazan a España
El Estado Islámico, fuerte en el polvorín libio, genera inestabilidad en una región clave para nuestro país.
15 noviembre, 2016 01:13Noticias relacionadas
De la Primavera Árabe al avispero en el que combaten infinidad de fuerzas. Libia amenaza con convertirse en un foco de inestabilidad difícil de resolver, en el que el Estado Islámico ha logrado avances importantes. Las mafias, por su parte, aprovechan las turbulencias para lanzar a cientos de miles de refugiados al mar. La estrategia geopolítica del Mediterráneo se topa de bruces con el yihadismo, que amenaza con extender sus tentáculos hacia sus países vecinos, incluido España.
"Claro que Libia supone un riesgo potencial", aseguraba en septiembre Pedro Morenés -cuando todavía estaba al cargo de Defensa-, en una visita a las tropas españolas en el Líbano. El Estado Islámico ha logrado dar el salto de sus países de origen, fundamentalmente Siria e Irak, para extenderse más allá de sus fronteras. Su política de defensa se basa en la expansión y su intención es prolongar su área de influencia hacia el oeste.
"El Estado Islámico busca su asentamiento en Libia como punto de inicio a su expansión en el norte de África", explica el capitán de Infantería José María Diz Monje en un artículo publicado en Revista Ejército. "Aunque puede verse por algunos como la búsqueda de una 'alternativa' a Irak y Siria ante la presión internacional que está recibiendo en su principal santuario -prosigue el capitán Diz-, el objetivo del Estado Islámico y el califato es la extensión por todas las tierras del Islam".
De acuerdo a su valoración, "no se debe infravalorar" la capacidad del Estado Islámico de reclutar a nuevos combatientes o para hacerse con fuentes de financiación de peso en la región: "Es una grave amenaza para la seguridad internacional y puede exportar problemas a los países de alrededor, como Túnez (ya está en ello), Argelia o Egipto", explica, antes de incidir en que el verdadero riesgo puede llegar si los grupos terroristas se unen en una causa común, la yihad global.
El Estado Islámico ya ha logrado absorber a organizaciones locales para que luchen bajo su bandera. El general Miguel Ángel Ballesteros, en su libro Yihadismo, explica el papel de Al Bagdadi -líder de la organización terrorista- en estas fusiones: "En septiembre de 2014 envió a uno de sus lugartenientes, Abu Nabil al Anbari, un veterano de Irak, para que estableciera contacto con Ansar al Sharia".
El papel de la UE y de la OTAN
La Unión Europea cuenta con una misión de apoyo en Libia, cuyo objetivo es el de dotar al Gobierno de los medios necesarios para combatir la inestabilidad por iniciativa propia. La misma táctica se emplea en países próximos. Por su parte, la OTAN ha sopesado la posibilidad del envío de tropas a Libia, si bien por el momento ha optado por colaborar con otras organizaciones internacionales -como el Africom- en su intento por pacificar la región.
En el caso de que la Unión Europea o la OTAN decidiesen dar paso a una intervención militar activa, España, como miembro integrado, respondería al llamado de sus alianzas internacionales.
Por el momento, el despliegue militar se limita al Mediterráneo, donde desde la operación Eunavfor Sophia se intentan paliar los efectos del tráfico de seres humanos. En la actualidad, la Armada española cuenta con la fragata Navarra. Hasta el momento, y durante su primer año de intervención, las Fuerzas Armadas han rescatado a unas 7.000 personas en el marco de esta operación.
*Vídeo: La Guardia Costera Italiana rescata a 6.500 personas en el Mediterráneo.
"Hay que prever las situaciones"
"El Estado Islámico es uno de los agentes que ha propiciado la inestabilidad que ahora reina en Libia y que las mafias utilizan para lanzar a los migrantes al mar", explica el coronel Pedro Baños, quien durante años ocupó la jefatura de Contrainteligencia y Seguridad del Cuerpo de Ejército Europeo en Estrasburgo, además de diferentes cargos en Defensa relacionados con análisis y estrategia.
"El plan de la UE que se ha aprobado e implementado es solucionar el problema en origen", explica el coronel Baños. Según considera, es importante "prever las situaciones" que se pueden dar en el escenario libio: "Hay que tenerlo en cuenta y vigilarlo".