En contra de la expansión del discurso xenófobo y divisivo entre distintos mandatarios y líderes políticos del mundo que Amnistía Internacional evalúa en su informe anual sobre los derechos humanos, España se mantiene alejada de ese populismo. Para el director de la ONG, Esteban Beltrán, "en general en España hay un discurso positivo".
Sin embargo, advirtió en la presentación del informe, que ello "esconde una inacción preocupante a la hora de acoger a los refugiados e inmigrantes". Lamenta que España apenas haya cumplido con un "4% de su compromiso de acogida de refugiados, a la cola de Europa". Además, asegura que sigue sin solucionarse la indigencia a la que lleva a medio plazo la desatencion de los solicitantes de asilo pasado el primer medio año. "No existen garantías de protección", asegura.
Amnistía Internacional ha acudido cuatro veces a Ceuta y Melilla en el último año para evaluar la situación de los migrantes en las ciudades que suponen la puerta de entrada a España y el resto de Europa para cientos de migrantes y solicitantes de asilo. "Es un limbo donde no existen derechos", denuncia Beltrán. La ONG ha documentado distintos tipos de violaciones de los derechos humanos en 2016 allí:
1. Casi imposible solicitar asilo
En la frontera es "francamente difícil solicitar asilo e imposible si no eres sirio", señala Beltrán. Cualquier persona que huya de conflictos en el África subsahariana tiene prácticamente rechazada la solicitud de antemano, denuncia. El acceso es "discriminatorio y difícil".
2. Deportaciones ilegales
Las denominadas expulsiones en caliente "son un eufemismo", porque son simple y llanamente "expulsiones ilegales".
3. Expulsiones de heridos
Amnistía ha documentado también cómo "a veces" han sido expulsadas personas heridas leves que después han sufrido malos tratos y torturas por parte de la gendarmería marroquí.
4. Sin libertad de movimiento
Esteban Beltrán explica que "se restringe la libertad de circulación" a los solicitantes de asilo. No se pueden mover hacia la península. Por contra, para ir de "Aranda del Duero a Bilbao, no tienes ningún problema" como solicitante de asilo, ejemplifica.
5. Falta de acceso a información
"No te dan információn de lo que te va a pasar como solicitante", señala el director de la ONG. Tampoco es que considere satisfactoria la información facilitada en otros lugares de España a personas en situaciones similares, pero Amnistía ha detectado una situación especialmente clamorosa en Ceuta y Melilla.
6. Centros de inmigrantes con ley propia
Los Centros de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI) de ambas ciudades autónomas sufren hacinamiento y acogen a menores de edad no acompañados. Tienen "su propia dinámica de violación de los derechos humanos", asegura Beltrán.
La conclusión a la que ha llegado Amnistía es que "Ceuta y Melilla son un lugar particular de España donde la violación de derechos humanos está más agravada". Por ello, la organización ha pedido la suspensión de los acuerdos de cooperación entre España y Marruecos"hasta que no haya respeto en el trato de inmigrantes y refugiados".
"España usa Marruecos como un lugar donde expulsar a gente y donde no se cumplen los derechos humanos", sentencia.