Alejandro Requeijo Daniel Montero

Pedro Luis Gallego, conocido como El violador del ascensor fue excarcelado en 2013. Seguiría en prisión hasta 2022 de no ser por la derogación de la doctrina Parot por parte del Tribunal Europeo de Derechos Humanos de Estrasburgo (TEDH), que el año 2013 le dio la razón a la etarra Inés del Río. Esta doctrina, aplicada por el Tribunal Supremo en 2006, defendía que las redenciones de condena deberían aplicarse sobre el total de la pena impuesta (en ocasiones miles de años) y no sobre el límite máximo de cumplimiento, que en España eran 30 años (hasta 2003 que se aumentó a 40 años).

De este modo, había condenados con penas muy altas que jamás llegan a ver reducida su condena hasta que llegó la sentencia del TEDH. El Gobierno aceptó aplicarla tanto a la etarra Inés del Río como a todos los presos que se encontraban en su misma situación y de forma retroactiva: se excarceló a todo aquel al que desde 2006 se le hubiese aplicado la doctrina Parot (llamada así porque fue la consecuencia de un recurso presentado por etarra Henri Parot).

Beneficiados por la derogación

Adelantaron su salida decenas de miembros de la banda terrorista, un reducido grupo de los Grapo, pero también varios violadores como el detenido este jueves en Segovia. En concreto, los beneficiados no terroristas aquellas primeras semanas fueron al menos ocho violadores y pederastas y cinco asesinos y criminales graves.

Junto a Pedro Luis Gallego, las diferentes Audiencias Provinciales acordaron derogar la doctrina Parot y poner en libertad a Pablo García Ribado, el violador del portal; Antonio García Carbonell; Arturo Abal Iglesias, Jesús Octavio G.M.; Manuel González González, el loco del chándal y José Antonio Carmona Molina, asesinó de un niño de 10 años al que intentó violar. También Felix Vidal Anido, conocido como el violador del estilete.

Este fue siempre fue uno de los argumentos que utilizó el Gobierno para oponerse a la derogación de la doctrina Parot. Alegaban que no sólo afectaba a la cuestión terrorista, sino también a múltiples criminales con riesgo de reincidir.

Reincidentes

Ante las voces que pedían algún tipo de medida preventiva contra este tipo de delincuentes excarcelados, el Ministerio del Interior defendió siempre que cuando una persona es puesta en libertad se considera que ha saldado su deuda con la sociedad y no era posible aplicar medidas especiales de seguimiento y vigilancia.

El del violador del ascensor no es el primer caso de excarcelado por la derogación de la doctrina Parot que vuelve a ser detenido. En 2014, meses después de su puesta en libertad, las fuerzas de seguridad arrestaron en Galicia a Félix Vidal Anido, conocido como el violador del estilete, por un delito de agresión sexual en grado de tentativa. Había sido condenado a 70 años de cárcel por varias violaciones.

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