"La coordinación entre todas las policías está funcionando muy bien desde siempre y en todo momento". Existe una "máxima colaboración de la Guardia Civil, el Cuerpo Nacional de Policía y el CNI". Son palabras del president de la Generalitat, Carles Puigdemont, confirmadas por fuentes policiales de los distintos cuerpos consultadas por EL ESPAÑOL. En ese mismo sentido se pronuncian fuentes del Gobierno, que aseguran que la colaboración está siendo "total".
Esa cooperación contrasta enormemente con la extrema desconfianza que sigue existiendo entre Puigdemont y el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, trasladada al nivel inferior entre el conseller de Interior, Joaquim Forn, y el titular de Interior del Ejecutivo central, Juan Ignacio Zoido. Hasta este viernes sólo se produjeron llamadas telefónicas entre ellos. Las primeras comparecencias de Rajoy y Puigdemont fueron por separado. Ambos reclamaron unidad, pero evitaron la foto conjunta en las primeras horas de la tragedia.
Muy coordinados, muy por separado
Los dos presidentes siguen desde Barcelona la evolución de la crisis, pero no se vieron en ningún momento hasta el minuto de silencio que los congregó, junto al rey Felipe VI, a mediodía de este viernes en la plaza de Cataluña. La primera reunión conjunta no se celebró hasta las 13:00 del viernes, es decir, 20 horas después del atropello masivo que se saldó con 13 víctimas mortales, según el recuento provisional. Se trató de una reunión del gabinete de crisis del Govern de la Generalitat en la consellería de Interior y presidida por Rajoy.
Al finalizar la reunión, Rajoy y Puigdemont sí comparecieron juntos. "Creo que es importante no sólo la coordinación entre fuerzas y cuerpos de seguridad sino también la coordinación entre el resto de administraciones y entre los políticos", pidió Rajoy.
En la noche del viernes, Puigdemont había presidido su propio gabinete de crisis en el Palau de la Generalitat junto a responsables de la consellería de Interior y los Mossos d'Esquadra. A la reunión fue invitada Ada Colau y el delegado del Gobierno en Cataluña, Enric Millo. Sin embargo, Millo no compareció en la rueda de prensa posterior, pasadas las 21:00, en la que habló por primera vez el president de la Generalitat, así como la alcaldesa de Barcelona.
Sólo dos niveles de la Administración estuvieron representados en la primera gran comparecencia tras el atentado: el municipal y el autonómico, éste último por partida doble, ya que en la imagen distribuida en directo por todas las televisiones figuraba también el vicepresident de la Generalitat, Oriol Junqueras.
Los Mossos no participan en el Comité de Seguimiento con Rajoy
Hasta el mediodía de este viernes se habían celebrado dos reuniones del comité de seguimiento de la crisis que encabezó en ambos casos el presidente del Gobierno. Rajoy, junto a la vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría, y el ministro del Interior, se reunieron con responsables de la Guardia Civil y la Policía Nacional. A esas reuniones no estaban invitados los Mossos d'Esquadra, a pesar de que han dirigido el operativo policial.
Gobierno y Generalitat presumen de una exquisita colaboración policial, pero la tragedia no ha evitado que saltase alguna chispa en forma de reproche por parte de Puigdemont. En una entrevista en Catalunya Radio criticó que no se permita a la Generalitat ampliar el cuerpo con 500 efectivos más: "Cuando convocamos plazas y se nos impugna la convocatoria de 500 Mossos d'Esquadra nos quejamos con razón. Cuando reclamamos que los Mossos estén presentes en los organismos internacionales donde se coordinan los esfuerzos policiales en la lucha contra el terrorismo es porque creemos firmemente que es una buena manera de luchar contra el terrorismo", lamentó.
En ese sentido, según él, "el camino correcto es empoderar a los Mossos d'Esquadra".
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