La declaración unilateral de independencia y la creación de un nuevo Estado siempre estuvo en los planes del Govern, según se desprende de los documentos (Enfocats) que le incautaron al número 2 de Oriol Junqueras, Josep María Jové Llado, el pasado 20 de septiembre. Ni mediación ni diálogo, todo forma parte de un plan.
Sin fecha ni autor, el documento se remonta a las elecciones de 2015 y en él se prevé las reacciones del Gobierno de Mariano Rajoy, la actuación policial, las de la Justicia y hasta la posibilidad de la marcha de empresas que provocaran un bajón económico.
Su clave para contrarrestar todo eso, según el documento, es la calle: hay que generar "como último recurso un conflicto democrático de amplio apoyo ciudadano, orientado a generar inestabilidad política y económica, que fuerce al Estado a aceptar la negociación de la separación o un referéndum forzado".
En estas actuaciones estarían involucrados los jefes de los Mossos, según establece el documento.
En cuanto a la formación del nuevo Govern en una Cataluña independiente se establecen dos fases: la primera con un Gobierno de transición que no debería durar más allá de 2018 con una mayoría social proindependencia y la segunda con un Gobierno ya independiente que estaría vigente hasta 2022.
En el documento incluso se prevé el control de estructuras regionales para darles un funcionamiento estatal, Mossos d´Esquadra o el CTTI, entre otras, y algunas de nueva creación para conformar todo un estado como una hacienda, el poder judicial...
"Hemos de asegurar el funcionamiento mínimo imprescindible de todas las estructuras del Estado para gestionar la desconexión y el nacimiento del estado propio", advierte.
El documento da un papel especial a los presidentes de la ANC y Omniun para la creación de estrategias que vayan conformando la Cataluña independiente. Su labor estaría casi al mismo nivel que Puigdemont y Junqueras.
La etapa final, según establece esta estrategia, sería convocar "elecciones cuando se sepa que habrá un nuevo Parlamento independenstista".
Los ideólogos de este camino aclaran que los papeles no pueden salir a la luz pero que sí tienen que dejar claro a todo el mundo que la hoja de ruta existe para dar credibilidad y fuerza a su propuesta en la calle.
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