Carles Puigdemont sigue asomado al abismo. Con un paso más hacia el precipicio, ha renunciado a convocar elecciones. El Parlament celebra un pleno esta tarde y podría proclamarse la independencia de Cataluña.
Despejando la pelota hasta el tejado de La Moncloa, el líder de la Generalitat ha reiterado que no ha llamado a las urnas por no "tener garantías" de que Rajoy desactivaría el artículo 155 en contrapartida. Estas son las cinco claves para descifrar a Puigdemont, que otra vez ha arrojado más interrogantes que conclusiones.
"No existen garantías" por parte de Rajoy
Con el agua al cuello, Puigdemont se había decidido a convocar elecciones autonómicas en Cataluña siempre y cuando Rajoy prometiera renunciar al artículo 155 de la Constitución. "He considerado la posibilidad (...), diversa gente me ha interpelado, mi deber y mi responsabilidad es agotar todas las vías, pero no existen las garantías".
El Senado sigue trabajando en la revisión de las medidas propuestas por el Gobierno central en torno al 155. Esta vez, Moncloa no cede. De ahí que el president haya prolongado su huida hacia delante.
El ataque al "vengativo" Gobierno de España
A pesar de la premisa del diálogo continuamente esgrimida, Puigdemont ha dado varias estocadas al Ejecutivo de Rajoy, al que ha calificado de "vengativo" y represor. El 155 "es una aplicación abusiva e injusta que busca erradicar el soberanismo y el catalanismo".
El president ha dicho "no aceptar" las medidas que siguen al 155 por "injustas" y por no detener "la represión".
Las grietas del Govern, entre líneas
Las más de siete horas de duración de la reunión de la pasada noche que Puigdemont mantuvo con sus consejeros alojó las diferencias que ya separan a las distintas facciones que engrosan el independentismo.
Quienes quieren la ruptura a cualquier precio, Gabriel Rufián al frente, han tachado de "traidor" al president. El propio Puigdemont, partidario de la secesión, ha dicho haber "considerado" la convocatoria de elecciones "porque mucha gente" le ha interpelado. "Mi deber era intentarlo", ha resumido.
El refuerzo del victimismo de cara a Europa
Puigdemont sabe que le escuchan con atención en el extranjero. En busca de reforzar su relato victimista, ha reiterado que "nadie" podrá decir que él "no lo ha intentado". Tampoco "nadie" podrá acusarle de no haber hecho "sacrificios" por el "diálogo".
A juicio del mandatario separatista, ha sido Rajoy quien les ha golpeado con el relato de "a por ellos", en lugar de haber promocionado el "con ellos". "Durante estas próximas horas, nuestro compromiso con la paz será más firme que nunca".
Sigue la huida hacia delante
Carles Puigdemont ha terminado su discurso cuarenta minutos antes de que comience el pleno de Parlament. Lejos de renunciar a la DUI, ha exclamado: "Tengo que seguir con mi responsabilidad" y defender "el sentimiento de la gente" -refiriéndose a los resultados del referéndum del 1 de octubre-.
Hasta que no hable la Cámara catalana, sigue el stand by.