José Manuel Maza murió este sábado en Buenos Aires víctima de una infección renal. El pasado lunes, poco después de aterrizar en Sudamérica, el Fiscal General pensó que tenía algo de "catarro". A medida que avanzó la semana, le subió la fiebre hasta desorientarle. Entonces fue ingresado. La infección renal detectada -que no pudieron frenar los antibióticos- le produjo un fallo multiorgánico.
Una web asegura que Maza habría sido envenenado a través de una toxina por agentes próximos al Mossad. Esta información, que no acredita ningún tipo de fuente o fundamento, ha exasperado a la Fiscalía. Según ha sabido EL ESPAÑOL, el ministerio público considera el texto ridículo e infundado.
Red Adler publicó su particular "exclusiva" poco después de morir Maza. La web explicita que el veneno que "se le inoculó" provoca "una alta toxicidad renal", "elemento que coincide con la súbita y mortal infección en los riñones que acabó con su vida".
Se trata de "una variante alterada en laboratorio de la toxina Shiga, extraída de bacterias Shigella dysenteriae", aventura el texto.
¿Quién es Red Adler?
También se atreven a apuntar que la toxina habría sido ingerida por Maza "de forma voluntaria", víctima de "un engaño" mediante una bebida cualquiera. No sólo eso; como causa del "asesinato" queda referida una "venganza aplastante del Estado contra el desafío secesionista catalán auspiciada por el sionismo internacional".
Los impulsores de esta información se definen como "una red civil de información de carácter discreto, hermanada con redes similares de todo el mundo". Aseguran esconder su identidad por "razones de seguridad". "Defendemos la tradición y la sabiduría de nuestros pueblos y el respeto a sus identidades originarias", concluye su presentación.