Cuatro detenidos por la última diversión: grabar a los pitbull devorando alimañas
Difundían los vídeos entre sus conocidos. Primero entrenaban a los perros para que atacaran con fiereza a las presas, cazadas ilegalmente con cebo.
31 diciembre, 2017 01:17Noticias relacionadas
El equipo ROCA de la Guardia Civil de Antequera (Málaga) ha detenido a cuatro personas que realizaban cacerías utilizando cebos, una modalidad prohibida, con el fin de dejar a las alimañas malheridas y soltarlas ante perros de caza Pitbull para que se ensañaran con ellas.
Las cuatro personas acusadas de estos hechos y detenidas en la localidad malagueña de Villanueva de Algaidas entrenaban de esta manera a los perros de presa, a los que también suministraban anabolizantes para que estuvieran más fibrosos y fuertes.
Además, grababan la escena y después la difundían entre sus conocidos para que se divirtieran con ella, según han podido saber los investigadores. Todos están imputados por los presuntos delitos de maltrato animal y contra la flora y la fauna.
La Guardia Civil pudo dar con ellos porque llevaban desde marzo de 2016 investigando a distintas personas que formaban parte de una organización criminal mayor dedicada al robo "por encargo" de perros de caza en las provincias de Málaga, Granada, Córdoba y Jaén.
Operación Canis Petra
El robo de varios perros de caza en un corto período de tiempo en pueblos del norte de la provincia de Málaga, como Cuevas de San Marcos, Villanueva de Tapia y Villanueva de Trabuco, puso a la Guardia Civil en alerta.
Precisamente en Cuevas de San Marcos, los investigadores siguieron a un hombre que tenía controladas las fincas de caza de la zona. Sabía el número y el tipo de perros que había, así como las medidas de seguridad existentes en cada finca, cortijo o chalet. Él era quien avisaba al resto de miembros de la organización para que cometieran los robos.
De hecho, algunos de los perros eran adjudicados antes incluso de ser robados. Él daba a los potenciales compradores los detalles (raza, color, tamaño...) de los perros que controlaba para después robarlos y entregárselos.
La organización, dentro de la que se ha detenido a 22 personas, cometió hasta 56 delitos, no solo de robo de perros, sino también de tráfico de drogas, de armas, falsificación de documentos y blanqueo de capitales. La Guardia Civil registró hasta siete domicilios en Granada capital, en la localidad granadina de Huélagos y en Cuevas de San Marcos, donde recuperó 42 perros de distintas razas e intervino 19 armas de fuego, así como material para medicar a los animales y microchips para hacer que parecieran suyos. Los detenidos también tenían una plantación de 102 plantas de marihuana.
Para desarticular la importante trama, también ha sido importante la colaboración de centros de acogida de animales, veterinarios y oficinas comarcales agrarias.