Luis Enrique García Arango, José Manuel Costa Rial, José Manuel Costa Abal, Ramiro Somoza Núñez... son nombres que pueden resultar anodinos para la mayoría de los ciudadanos, pero sobre sus hombros recaen algunos de los episodios más oscuros del tráfico de drogas en España. También el de José Ramón Prado Bugallo, alias Sito Miñanco. Todos ellos forman parte de la lista de 43 detenidos en el marco de la Operación Mito explotada este lunes por la Policía Nacional, en la que han caído algunos de los narcos históricos de nuestro país y que se ha saldado con cuatro personas heridas con motivo de un tiroteo.
Las andanzas de Sito Miñanco son relativamente conocidas. Nacido en 1955 en Cambados (Galicia), dedicó su trayectoria al tráfico de tabaco y de droga, especialmente en las décadas de los 80 y 90. Sus fuertes lazos con otros delincuentes colombianos lo convirtieron en el rey de la coca en Galicia. Fue detenido en 1983, 1989 y 2001. Debería haber permanecido en prisión hasta este año, pero en 2015 la Audiencia Nacional le concedió un permiso para trabajar entre semana en un aparcamiento de Algeciras.
Sito Miñanco era, sin lugar a dudas, el capo de la droga en Galicia junto a Laureano Oubiña y el clan histórico clan de Los Charlines. Y como tal se rodeó de varios lugartenientes, trapicheó con otros delincuentes y tejió una red de tráfico de drogas a gran escala que se extendía desde el sur de América hasta toda Europa y que fue ya desarticulada hace dos décadas por Justicia.
Este lunes ha vuelto a ser detenido. La Policía registró varios inmuebles en el dispositivo. Uno de ellos era en el que se hospedaba Sito Miñanco cuando disfrutaba de sus permisos penitenciarios. Los agentes encontraron en su interior una caja fuerte, que forzaron para encontrar documentación relacionada con un supuesto caso de blanqueo de dinero. La caja, que Miñanco se llevó apresuradamente tras romper la convivencia con su ex mujer, resultó estar vacía.
Su nombre evoca los tiempos en los que se forjaron figuras históricas en el submundo narco de nuestro país. Pero su entorno duda de la veracidad de las acusaciones, y las vinculan con el reciente juicio que Miñanco tenía que afrontar el próximo 27 de febrero. De hecho, varias de las personas y empresas ahora investigadas están también inmersas en ese procedimiento. Algo que hace sospechar al entorno del capo, hasta hoy en tercer grado, sobre las posibles intenciones de este operativo, coordinado por la Audiencia Nacional.
Según ha podido confirmar EL ESPAÑOL, parte de la operación se centra en la droga decomisada el pasado mes de octubre en un barco llamado Thoran, que transportaba 3,8 toneladas de cocaína.
30 años de actividad
Para hablar Luis Enrique García Arango, uno de los 43 detenidos en el marco de la Operación Mito, hay que remontarse a 1988. Actuaba como enlace en España con los narcos sudamericanos.
En marzo de ese año fue detenido en Madrid. Se le consideraba el cabecilla de una organización a la que se le incautaron 325 kilos de cocaína. Al cabo de una semana, se localizaron otros 312 kilos de la misma droga a bordo de un barco, el Isla de Malta, en Panamá.
Desde entonces, García Arango se convirtió en uno de los hombres de confianza de Sito Miñanco. Ninguno de los dos ocultó su relación de amistad en su rosario de declaraciones judiciales tras cada una de sus detenciones. Arango acumula varias condenas relacionadas con el tráfico de drogas.
Choque en alta mar
En 1993, la Policía llevó a cabo un dispositivo para abordar varias embarcaciones en aguas gallegas, sospechosas de participar en el tráfico de drogas. Una de ellas era la Mar Tere.
En la persecución, los agentes embistieron a la barca sospechosa y detuvieron a sus ocupantes. Sin embarco, no lograban encontrar al capitán de la embarcación, José Manuel Costa Rial. La marea era fuerte y pensaban que había caído al agua.
Tras un registro con mayor profundidad, lo encontraron en la caja de cadenas y anclas. Ese fue el inicio de una vida interrumpida por las detenciones, condenas y el tráfico de drogas. Costa Rial también fraguó negocios con Sito Miñanco y es uno de los 43 detenidos en la macro operación de este lunes.
El hijastro de Oubiña
Es habitual que entre los clanes gallegos dedicados al tráfico de drogas imperen los lazos familiares, que las estructuras delictivas se hereden de padres a hijos. Ese es el caso de David Pérez Lago, otro de los detenidos en la Operación Mito. Su padrastro no era otro que Laureano Oubiña, el histórico narcotraficante de Cambados.
David Pérez Lago ya ha sido arrestado en otras ocasiones. Fue capturado en 1999, primero, en el marco de la Operación Ocaso, y en el año 2000, después, cuando fue localizado en Grecia en compañía de Oubiña, que se encontraba en busca y captura.
El legado de Cambados
Oubiña y Sito Miñanco compartían una trayectoria dedicada al narcotráfico y sus raíces en Cambados (Pontevedra). Este pueblo de apenas 14.000 habitantes ha visto nacer a varios de los capos de la droga más destacados de Galicia. Ramiro Somoza Núñez es uno de ellos.
En noviembre de 2003 fue detenido después de que la Policía interceptase el barco Doña Rosa, de pabellón venezolano, con 1.500 kilos de droga a bordo. En la operación fueron detenidas 13 personas. Somoza Núñez, capturado este lunes, era uno de los cabecillas de esa organización desarticulada.
Los 43 detenidos
La macro operación se ha precipitado este lunes en diferentes puntos de España. Las actuaciones policiales han sido ordenadas por la jueza Carmen Lamela, de la Audiencia Nacional, que se encontraba de guardia en el juzgado.
La actuación coincidió, además, con un acto celebrado en la comisaría de la Policía Nacional de Canillas, donde se celebraba el 50º aniversario de la creación de la Brigada Central de Estupefacientes en un acto al que asistió Felipe VI. Varias de las unidades que tenían previsto acudir al evento se vieron obligadas a intervenir en la Operación Mito.
De este modo, la Policía Nacional ha 'jubilado' de forma forzosa a algunos de los narcos históricos de nuestro país. Los detenidos tendrán que responder a los cargos de organización delictiva, blanqueo de capitales y tráfico de drogas.