La ministra de Sanidad, Dolors Monserrat, ha afirmado este lunes que el Gobierno incluirá una casilla lingüística en los formularios de preinscripción de las escuelas catalanas para garantizar el derecho de las familias a que sus hijos reciban la educación en castellano. Sin embargo, un par de horas más tarde, el Ministerio de Educación ha corregido las declaraciones de Montserrat: "La casilla sigue siendo solo una de las varias opciones que se barajan", ha afirmado a EL ESPAÑOL un portavoz autorizado.
La ministra había afirmado en Badalona durante una visita al Instituto de Investigación Germans Trias i Pujol (IGTP) que la prioridad del Gobierno "es el derecho de los padres a escoger libremente la educación de sus hijos. Y por tanto vamos a cumplir la ley y vamos a cumplir las sentencias. Por ello va a existir esta casilla porque es devolver el derecho a los padres".
Desde Educación señalan a este periódico que el principal objetivo es garantizar el derecho a aprender en castellano, pero que la inclusión de la llamada casilla lingüística no está todavía confirmada. Íñigo Méndez de Vigo dijo el viernes que estaban estudiando la fórmula para aplicar esta medida aunque rechazó explícitamente que ya hubieran fijado la casilla. Fuentes del Ministerio de Sanidad consultadas por este periódico también han querido matizar las declaraciones de su titular.
Polémica en Baleares
Montserrat también ha advertido de que poder "perder" a un profesional sanitario en Baleares por no saber catalán perjudica a los pacientes, en referencia a la manifestación del domingo en Palma convocada por la plataforma Mos Movem en contra del requisito del catalán para trabajar en este sector.
Ha añadido que lo más importante para su gobierno es mantener el talento de los profesionales sanitarios y "que ningún paciente se sienta perjudicado por una lengua, porque las lenguas no salvan vidas". Asimismo, ha constatado que en Baleares hay cooficialidad de catalán y castellano.