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La presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, ya no ha podido aguantar más los escándalos. Primero fue el máster que consiguió "con condiciones especiales pactadas por la universidad" y ahora un vídeo de 2011 en el que se ve a la entonces vicepresidenta de la Asamblea de Madrid robando dos cremas en un supermercado de Vallecas.
"Éste es el pago que tengo que hacer por haber mantenido una postura de tolerancia cero hacia la corrupción en la Comunidad de Madrid", ha asegurado durante la rueda de prensa.
Cifuentes ha dado las gracias a los madrileños durante su dimisión y ha insistido en que "se va con la cabeza bien alta" porque lo que ocurrió en el super de Vallecas fue "un error involuntario, me llevé unos productos de 40 euros por error y luego los aboné".
La ya expresidenta del Gobierno ha asegurado que tenía la decisión tomada de su marcha y que la iba a comunicar después del 2 de mayo, fiesta de la Comunidad de Madrid, pero que todo esto le ha hecho adelantarlo.
"En la vida no vale todo y yo he aguantado que me espíen y que me extorsiones antes y después de ser delegada del Gobierno y esta decisión la he tomado por mi familia", ha aclarado.
El escándalo del máster
La dirigente popular lleva semanas tratando de deshacer la tormenta del máster de la Universidad Rey Juan Carlos asegurando, incluso en sede parlamentaria, que lo único que hizo fue seguir las normas que le dio la dirección del máster.
Reconoció eso sí, que no asistió a clase y que le adaptaron el curso para que pudiera seguirlo cuando la nombraron delegada del Gobierno de Madrid y acabó renunciando a un título que sólo la Universidad le puede quitar pero que le sirvió para ganar tiempo dentro y fuera de su partido.
El problema del escándalo del máster para Cristina Cifuentes siempre ha sido el Trabajo Fin de Máster (TFM). Nadie lo ha visto nunca, nadie lo encuentra y además, la ya expresidenta de la Comunidad de Madrid se empeñó en que lo había defendido personalmente cuando el acta de ese día primero no aparecía y luego se demostró que se había fabricado ex profeso y con al menos dos de las tres firmas de profesores falsas.
Sin embargo, Cifuentes seguía manteniendo apoyos en el partido, Mariano Rajoy no acababa de matarla y algunas voces con autoridad, como María Dolores de Cospedal, seguía defendiendo que el tema del máster no era para dimitir puesto que ni estaba imputada ni había cometido ninguna ilegalidad.
Cuando parecía que podría llegar en su cargo al menos a la moción de censura que ha presentado el PSOE, se ha hecho público un vídeo de 2011 en el que se ve a Cifuentes con un guardia de seguridad del Eroski haciendo frente al pago de dos cremas que había robado anteriormente en la sección de perfumería.
Los hechos ocurrieron el 4 de mayo de 2011, ocho meses antes de que asumiera el cargo de delegada del Gobierno y ha sido la puntilla definitiva para una presidenta que siempre se ha definido como un látigo contra la corrupción.
Cifuentes seguirá como presidenta del PP de Madrid
Cristina Cifuentes ha sido diputada del PP de Madrid desde el año 1991 ocupando varios cargos tanto en la Asamblea de Madrid como en el partido. De hecho, cuando se grabó el vídeo del robo era vicepresidenta de la Asamblea. Después fue delegada del Gobierno, de enero de 2012 al 13 de abril de 2015 cuando lo dejó para ser candidata de los 'populares' a la Comunidad.
Es presidenta del PP de Madrid desde marzo de 2017 y, por lo que se ha visto en su perfil personal de Twitter no piensa dimitir por ahora.
De hecho, la propia Cristina Cifuentes ha borrado de su biografía del perfil el cargo de presidenta de la Comunidad de Madrid tras dimitir y ha dejado únicamente el de máxima responsable de los 'populares' madrileños.