La líder de Cs en Cataluña, Inés Arrimadas, ha aceptado su nombramiento como líder de la oposición en el Parlament pero ha renunciado a recibir sus retribuciones y beneficios que le corresponderían.
En un comunicado este domingo, ha recordado que en 2015 ya rechazó recibir "los privilegios que comporta esta figura política", como un complemento salarial y el trato protocolario, entre otros beneficios.
En el escrito que ha enviado a la Mesa del Parlament, recogido por Europa Press, Arrimadas ha renunciado a recibir el trato de "honorable señora", ser ordenada protocolariamente en el lugar inmediatamente posterior a los expresidentes de la Generalitat, percibir las retribuciones que determine el Parlament y disponer del jefe y el asesor de la Oficina de la Líder de la Oposición.