El Gobierno ha decidido personarse en la causa contra los miembros de La Manada, condenados por abusos sexuales, en el recurso pendiente de resolverse, y por ello va a estudiar las fórmulas para hacerlo. La portavoz del Gobierno, Isabel Celaá, ha anunciado que el Consejo de Ministros ha ordenado al "servicio jurídico del Estado que se persone como parte en defensa de las víctimas".
Los condenados, hasta ahora en prisión provisional y con una condena de nueve años por abusos, no por violación, podrán salir de la cárcel si abonan una fianza, algo que ha "sorprendido" al Gobierno.
Celaá ha asegurado que el Gobierno "respeta, como no podría ser de otra manera, las decisiones judiciales". Al mismo tiempo, ha asegurado que "los hechos probados son muy graves, son gravísimos". "El Gobierno se hace eco de la alarma social, de la preocupación social de España en su conjunto y de las mujeres en particular", ha dicho, y se propone defenderlas de las agresiones.
Se rompe la "regla de oro"
Al Ejecutivo ha sorprendido que los condenados puedan salir de la cárcel, algo que según Celaá rompe la "regla de oro" de mantenerlos en prisión, mientras estén condenados, al menos la mitad de la pena que se les ha impuesto. Según el Gobierno, los condenados podrían ser "proclives a la fuga".
Celaá también ha recordado otras dos medidas del Gobierno en relación a La Manada: la reforma del Código Penal para evitar que, en el futuro, este tipo de agresiones no sean consideradas abusos sino violación y una propuesta en el Congreso para mejorar la formación de técnicos que intervienen en estos procesos.
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