El presidente de Generalitat, Quim Torra, ha remitido una carta al ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, en la que reclama que le informe "urgentemente" de las medidas disciplinarias que prevé adoptar contra los agentes del orden público que han protagonizado acciones contra el soberanismo.
En la misiva, a la que ha tenido acceso Efe, el president hace referencia, entre otras cosas, a que un guardia civil se encontraba entre las 14 personas identificadas el pasado fin de semana cuando planeaban retirar lazos amarillos en varios municipios de Tarragona.
Torra alude también a los "insultos" que, asegura, recibieron en una calle de Barcelona dos diputados del Parlament por parte de un policía nacional y la "agresión" que sufrió el fotoperiodista Jordi Borràs a manos de otro agente de este cuerpo policial en esta misma ciudad. El president pide aclarar los hechos "lo más pronto posible" y considera "urgente poner fin a la escalada de violencia en Cataluña por parte de grupos violentos, así como depurar responsabilidades".
En la carta, firmada el martes y enviada este mismo miércoles al ministro, Torra expresa así su "preocupación" por los hechos que "están sucediendo" en Cataluña. Recuerda que el pasado 9 de agosto solicitó a la delegada del Gobierno en Cataluña, Teresa Cunillera, qué medidas disciplinarias preveían adoptar por los "insultos" a dos diputados y por la "agresión" a un periodista gráfico.
"A la vista del silencio de la delegada del Gobierno, me veo en la obligación de dirigirme a usted para manifestaros mi preocupación y solicitar vuestra intervención", escribe Torra a Grande-Marlaska.
Además, Torra prosigue su carta relatando la identificación por parte de la policía autonómica catalana de las 14 personas que pretendían retirar símbolos independentistas: "De las personas identificadas, parece contrastada la participación de un agente de la Guardia Civil en estos grupos armados y organizados que recorren el territorio catalán", afirma el president.
Por ello, y "sin perjuicio de las acciones penales que se tengan que tomar", Torra solicita en su carta que se le informe de forma "urgente" de las medidas disciplinarias que puedan adoptarse, puesto que estos hechos, afirma, "parecen adecuarse" a las prohibiciones tipificadas en la legislación española.
Entre estas prohibiciones, Torra cita la "ostentación o utilización de armas sin causa justificada, así como su uso en acto de servicio o fuera de él infringiendo los principios y normas que regulan su uso".
También, de estas prohibiciones, el president pone como ejemplo la de "organizar o participar o asistir llevando armas, vistiendo uniforme reglamentario o haciendo uso de su condición de guardia civil, a manifestaciones o reuniones de carácter político, sindical o reivindicativo que se celebren en lugares públicos".