El Gobierno se plantea enmiendas a la reforma de Ley de la Memoria Histórica para impedir que los restos de Francisco Franco vayan a la catedral de la Almudena tras salir del Valle de los Caídos. Con estas enmiendas sancionaría e incluso cerraría espacios públicos en los que se enaltezca el franquismo.
Que los restos de Franco vayan "a un lugar privado, decoroso sin ningún tipo de enaltecimiento ni posibilidad de hacerlo". Ese es el objetivo del PSOE, según explicó en rueda de prensa el pasado viernes la vicepresidenta del Gobierno, Carmen Calvo.
No cerró la puerta a que los restos de Franco puedan ser inhumados en un "lugar privado" de la cripta de la parroquia de la Almudena, siempre que se garantice que el dictador no pueda ser "enaltecido" ni homenajeado de ninguna manera.
Calvo explicó que el Gobierno utilizará todos los medios disponibles, entre ellos una enmienda en la Ley de la Memoria Histórica que se reforma en el Congreso, para dar cobertura a la exhumación y posterior inhumación en otro lugar.
Estas enmiendas se registrarían próximamente y evitarían que se cumplan las intenciones de la familia de llevar los restos a la cripta de la catedral de La Almudena, donde tienen comprado un espacio y donde descansa el cuerpo de la hija del dictador.
En la actualidad la cripta acepta visitas por lo que estaría dentro de las limitaciones que pondría el Gobierno a los espacios públicos.
El plazo para las enmiendas se prolongará una semana más tras una solicitud del PP y Ciudadanos de una prórroga que saldrá adelante gracias a su mayoría en el Congreso.