"Flipando". Así se confesaba un concejal socialista de Madrid tras conocer que Pedro Sánchez había escogido al entrenador de baloncesto Pepu Hernández como cabeza de cartel para la alcaldía de la capital. "Dentro estamos todos encendidos. La decisión no se entiende nada. ¿Meses de retraso para esto?", en palabras de un parlamentario autonómico. "Ojo con las primarias, va a haber competición seguro", según el secretario general de una agrupación de la capital. "Pedro ya ha elegido a su entrenador para la alcaldía. ¿Pondrá también a su masajista en la candidatura?", ironizaba en conversación con EL ESPAÑOL un conocido referente socialista, a modo de burla, sin salir de su asombro.

La candidatura de Hernández se dio a conocer el martes por la noche. Fue adelantada por La Sexta, pero en el PSOE-M la maquinaria estaba engrasada para propulsar al aspirante, por lo que la publicación de la noticia no fue, ni mucho menos, una sorpresa. El líder de los socialistas madrileños, José Manuel Franco, mandó rápidamente un whatsapp a la Ejecutiva regional en el que alababa las capacidades de Hernández. La cuenta en Twitter de su candidatura se activó de inmediato.

Los miembros de la Ejecutiva federal comenzaron a deshacerse en elogios hacia el aspirante a primera hora del miércoles. En poco tiempo, Hernández ya tenía acto de presentación. Será este domingo en Madrid y en él participará… Pedro Sánchez, que desde México dio su apoyo al aspirante

"Se me enciende una sonrisa", reconoció al escuchar el nombre del entrenador a preguntas de un periodista. Con el entrenador comparte instituto en Madrid y equipo de baloncesto, el Estudiantes. "Quiero agradecerle dos cosas: su compromiso con la ciudad de Madrid y la confianza que ha depositado en el PSOE".

Acto seguido, Sánchez despejó todas las dudas, por si quedaba alguna. "Yo votaré lógicamente por Pepu Hernández", dijo como "militante" del PSOE-M, a pesar de que también es el líder federal del PSOE y comparecía en una suntuosa sala del Palacio Nacional de Ciudad de México junto al presidente de ese país, Andrés Manuel López Obrador. 

Hernández será ungido por un Sánchez más que crítico en las últimas primarias federales ante el apoyo que, el entonces aparato, propició a Susana Díaz, a la que él batió. Ahora la situación es al revés. Sánchez controla el aparato, que está funcionando como una maquinaria perfectamente engrasada, y son los críticos los que denuncian injerencias que pervierten el sistema de primarias del partido al que tendrá que someterse el ex seleccionador nacional y exentrenador del Estudiantes, incluso a pesar de que no es militante. 

De momento, Hernández sólo tiene un rival, pero en el PSOE-M no descartan más, especialmente el nombre de una mujer que trate de superar tanto al aspirante reciente como al único hasta ahora declarado. Se trata de Manuel de la Rocha, un histórico socialista y antiguo diputado, con buena percepción en el partido pero al que hasta ahora pocos habían otorgado posibilidades reales de imponerse en la competición interna. 

"No es buen mensaje el decir que sólo son buenos candidatos a las instituciones más importantes de Madrid personas independientes que no militan en el partido", dijo este miércoles en declaraciones a Efe. 

Según De la Rocha, "no hay candidatos de primera ni de segunda, ni oficiales y oficiosos", ya que "los estatutos del partido establecen que los candidatos no los eligen los dirigentes sino que son votados por los militantes". Él dice ser mejor candidato por "experiencia en gestión", "conocimiento" de la capital y sus "problemas" y el "vínculo con los movimientos asociativos y ONG". 

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