Militares españoles de la fragata Navarra han interceptado una embarcación pirata y capturado a la dotación, que en los días anteriores había atacado dos barcos -uno de ellos, español-. El episodio ha tenido lugar en la mañana de este martes en aguas del Índico, en el marco de la operación Atalanta de la Unión Europea de lucha contra la piratería. El dispositivo ha culminado con la liberación de un pesquero yemení que llevaba cuatro días secuestrado.
Los militares manejaban informes sobre dos ataques que habían recibido dos pesqueros, uno español y otro de bandera coreana -aunque buena parte de su tripulación era también española-. Los criminales se habían lanzado contra los pesqueros con lanzagranadas. Uno de esos intentos de abordaje había sido repelido por el equipo de seguridad privada de abordo, hiriendo a algunos de los piratas. Estas medidas de protección se conocen con el nombre de BMP (Best Management Practises).
La fragata Navarra, embarcada en el puerto de Mombasa (Kenia), salió al mar en busca del barco pirata. A bordo estaba el comandante de la Fuerza, contralmirante Ricardo A. Hernández López. Un avión de patrulla marítima alemán P3-C sobrevoló la zona para enviar posibles informes de posición de dónde se encontraba la embarcación de los criminales.
El avión alemán localizó un pesquero de bandera yemení estilo jabeque -más conocidos como dhow- que remolcaba varios esquifes como los que emplean habitualmente los piratas. El barco yemení había sido capturado por los piratas cuatro días antes y ahora lo empleaban como buque nodriza desde el que lanzar sus ataques.
Con esos datos, y con el riesgo de que pudiese haber rehenes a bordo, la fragata Navarra puso rumbo a la localización del barco yemení. Lo ha alcanzado en la mañana de este martes, tras 28 horas de navegación. Los militares españoles comprobaron que se dirigía a una zona en la costa de Somalia empleada habitualmente por los piratas para instalar sus campamentos.
La situación, crítica, ha requerido de la intervención del equipo de Guerra Naval Especial que iba a bordo de la Navarra. El personal ha logrado abordar la embarcación pirata donde, según fuentes consultadas por EL ESPAÑOL, se ha encontrado con algunos de los criminales que habían resultado heridos en los abordajes frustrados de los días anteriores.
Los militares españoles han capturado a los piratas y todavía se encuentran recolectando evidencias de los hechos ocurridos, por lo que la operación está todavía abierta.
El episodio de Guinea
La captura de los piratas en las aguas que bañan Somalia se ha producido apenas unos días después de que el patrullero Serviola liberase otra embarcación tomada por criminales en el Golfo de Guinea. Dos episodios diferentes y no vinculados entre sí, pero protagonizados por la Armada en dos puntos de especial relevancia para los intereses españoles.