Pedro Sánchez ha insistido este jueves por la noche en la idea de que España necesita "un gobierno progresista que no dependa de los independentistas". En ese sentido, ha justificado el ofrecimiento a Podemos de un gobierno de cooperación. "Con Podemos tenemos discrepancias de fondo en ese asunto. Podemos no ofrece la posibilidad de gobernar sin los independentistas".
En una entrevista con Informativos Telecinco, el presidente del Gobierno en funciones ha dicho que sus objetivos coinciden con los de Pablo Iglesias "en varios puntos", aunque "Podemos defienda el derecho de autodeterminación o haya votado en contra de la suspensión de los presos electos". "Conjuntamente podemos hacer varias cosas, por eso hemos ofrecido esa forma de cooperación" a Pablo Iglesias.
Al ser preguntado por la posibilidad de indultar a los presos del procés, Sánchez ha evitado pronunciarse para "no interferir en el trabajo de los jueces", pero ha destacado el papel del presidente del Tribunal Supremo, Manuel Marchena. "El Supremo ha hecho un buen trabajo. El poder judicial ha dado una imagen ejemplar al mundo y a Europa".
En cuanto a la investidura ha dicho que, para lograrla, "deben abstenerse PP y Ciudadanos". "Entiendo que no apoyen el gobierno en concurso con Podemos, pero sí pueden abstenerse. Son partidos que se autoproclaman constitucionalistas y deben permitir la gobernalidad de España. Luego, que hagan toda la oposición que quieran", ha insistido.
El gobierno de cooperación con Podemos tendría "una hoja de ruta con conquistas sociales para los próximos cuatro años". Pedro Sánchez ha tendido la mano a Pablo Iglesias, después de que éste lo acusara de "obsesionarse con los sillones". "No tenemos obsesión por los sillones. Nuestro Gobierno ha tenido muchísimos responsables independientes. No tenemos un sentido patrimonializador del poder. Haré todo lo posible para evitar unas elecciones. Quiero un gobierno en julio".
"Los españoles ya han votado bastante", ha concluido sobre la posibilidad de volver a las urnas. "Tenemos que materializar ese voto en una gobernabilidad serena y estable".
Respecto al gesto que le hizo Trump en la cumbre del G-20, señalando con el dedo su silla, como si evitara su saludo, ha desmentido que "fuese así". "En las reuniones que hemos mantenido no ha habido coincidencia de pareceres. En ese momento me dijo que era un orgullo dirigir un país como España. Me dijo que le tenía mucho cariño a España", ha desvelado a pesar de que el contacto con el presidente estadounidense fue breve.