Los cambios en las funciones y la expansión de los límites físicos definen el futuro inmediato del Ejército del Aire. De ahí que el Ministerio de Defensa se plantee un cambio en su denominación, con el objetivo de abarcar las funciones exactas que abarca este cuerpo militar. La propuesta: Ejército del Aire y del Espacio.
En los últimos tiempos, las funciones de Ejército de Aire se han extendido más allá de la seguridad aérea más próxima. Sobre sus hombros ha recaído el análisis y la neutralización de amenazas más distantes en el plano físico.
Basta con mirar los últimos informes del Departamento de Seguridad Nacional (DSN), en los que ya hablan de la "seguridad aeroespacial" y no de la "seguridad espacial", como en ediciones anteriores.
La ministra de Defensa en funciones, Margarita Robles, ha admitido este martes la posibilidad de cambiar la denominación del Ejército del Aire. A su juicio, hablar del "siglo XXI" es hacerlo también del "espacio". Y ha destacado la labor que realiza el cuerpo militar en la defensa de este ámbito, en declaraciones recogidas por Europa Press.
23.000 efectivos
Sus palabras han tenido lugar en el acto de inauguración del XXIX Seminario Internacional Cátedra Alfredo Kindelán, en el Cuartel General del Aire, en Madrid. Según ha señalado, existe un "debate" en el seno del Ejército del Aire en torno a su denominación. Y la opción de "Ejército del Aire y del Espacio" es la que gana enteros en las quinielas.
El Ejército del Aire, fundado en 1939, cuenta con aproximadamente 23.000 efectivos. La tecnología ha sido clave en el devenir del cuerpo militar en las últimas décadas, si bien los últimos años han supuesto un reto para la estructura castrense.