El anuncio no llegó por parte del Ministerio del Interior. Tampoco del presidente del Gobierno o de la presidenta de Navarra. Los guardias civiles destinados en Navarra tuvieron constancia de que se iba a transferir Tráfico a la Comunidad Foral a raíz del acuerdo firmado entre PSOE y el PNV para investir a Pedro Sánchez. Una noticia que ha provocado un hondo malestar en el seno del Instituto Armado. No faltan las voces que acusan a Fernando Grande-Marlaska de haberles "mentido".
La transferencia de las competencias de Tráfico a Navarra es una reivindicación histórica de los Gobiernos forales, aunque la medida ha ido tomando forma en los últimos meses. Policía Foral y Guardia Civil comparten la vigilancia y control de las carreteras navarras. Los agentes, no obstante, temen que los partidos independentistas asuman este como el primer paso hacia su expulsión de la Comunidad.
La anterior presidenta de Navarra, Uxue Barkos, rubricó un acuerdo con Sánchez para asumir la seguridad vial en las carreteras de la región. Una firma que inquietó a los agentes, tal y como se lo hicieron saber a Marlaska en al menos dos encuentros.
La primera tuvo lugar en un Consejo de la Guardia Civil, órgano que reúne a los representantes de las diferentes asociaciones del Instituto Armado con altos cargos del cuerpo y del Ministerio de Interior. Según fuentes presentes en el encuentro, que tuvo lugar hace unos meses, desde el Departamento se les aseguró que no habría ningún traslado inminente de las competencias.
La segunda cita fue el 16 de septiembre de este año. El ministro de Interior visitó la comandancia de Navarra y, entre otras unidades, saludó a los agentes destinados en Tráfico. Fuentes del Instituto Armado detallan que, en ese encuentro, Marlaska volvió a negar la transferencia.
Declaraciones que un mes después respaldaría el director de la Guardia Civil en la misma comandancia navarra: "No está previsto de manera inmediata que se transfiera tráfico a Navarra", aseguró Félix Azón, según algunos de los allí presentes.
Malestar en el cuerpo
Palabras que han quedado en papel mojado. El tercer punto del acuerdo firmado entre PSOE y PNV recoge que "en el plazo de seis meses" se lleve a cabo la transferencia de Tráfico a Navarra "con el mismo contenido y extensión que las realizadas en su momento" al País Vasco.
El acuerdo entre PSOE y PNV ha provocado un hondo malestar en el seno de la Guardia Civil. Varias asociaciones del cuerpo, en conversación con EL ESPAÑOL, coinciden en la "mentira" del Ministerio del Interior en esta cuestión.
Desde Asociación Pro Guardia Civil (APROGC) consideran que, en el caso de no cumplir con su palabra, a Marlaska y al director del Instituto Armado "no les quedaría otra salida más que la dimisión".
La Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) acusa al ministro y a Félix Azón de "no defender" la labor del cuerpo: "Su inacción y falta de compromiso para defender a los casi doscientos guardias civiles de tráfico destinados en Navarra supondrá la enésima cesión en competencias de seguridad pública".
"Sánchez y el PSOE han ninguneado a los navarros saltándose a sus representantes y negociando directamente con el PNV las condiciones de su estatuto", denuncian desde la Asociación Española de Guardias Civiles (AEGC).