El positivo de Javier Ortega Smith por coronavirus ha activado todas las alarmas en Vox en particular y en la política española en general. Este martes el partido que lidera Santiago Abascal comunicaba oficialmente que su secretario general había contraído la nueva neumonía de Wuhan.
Desde la formación señalan que el dirigente se encuentra en su casa y su estado de salud es bueno, dentro de lo que implica la enfermedad.
Por el momento, se desconoce si existen más miembros del partido afectados. Pero toda precaución es poca, y tras el caso de Ortega Smith, Vox ha decidido “en lógica coherencia y por responsabilidad” que todos los diputados trabajen a partir de ahora desde casa, “desde donde controlarán a este gobierno irresponsable que juega con la vida de los españoles”.
Mitin con 9.000 personas
La noticia de la infección del político madrileño se produce, además, dos días después de que Vox celebrara un mitin multitudinario en Vistalegre (Madrid), al que asistieron en torno a 9.000 personas. Desde Vox explican que se plantearon suspender el acto por la imparable expansión de la epidemia. Optaron por mantenerlo, dicen, al ver que el Gobierno permitía que se celebraran manifestaciones, partidos de fútbol o actos religiosos.
Vistas las drásticas medidas adoptadas tan sólo un día después de Vistalegre -cierre de colegios y universidades-, Vox asume que fue un “error” por el que ha pedido perdón.
Durante el acto el dirigente de Vox saludó a decenas de personas con las que intercambió abrazos, apretones de manos y besos, entre ellos dirigentes del partido como Santiago Abascal, Rocío Monasterio, Iván Espinosa de los Monteros y Macarena Olona. De hecho, se tomaron varias imágenes en las que Ortega Smith aparece tosiendo y con un pañuelo en la mano.
Cuarentena en Jusapol
El de Vistalegre no fue el único acto multitudinario en el que participó Ortega Smith. Todo eran besos, achuchones y abrazos el martes de la semana pasada a las puertas del Congreso de los Diputados en la manifestación de Jusapol. En un momento dado, la marabunta formada por más de 10.000 policías (según datos de la asociación) se abalanzó hacia adelante contra las vallas del cordón policial.
Javier Ortega Smith había salido de las Cortes junto a una delegación del partido para saludar y mostrar así su apoyo a la equiparación salarial, la reivindicación que los agentes, tapados con máscaras de Anonymous, esgrimieron entre bengalas pancartas y un estruendo que se prolongó durante toda la mañana.
El secretario general de Vox repartió abrazos, saludó efusivamente a conocidos representantes sindicales, estrechó la mano de muchos, fue vitoreado a escasos centímetros. Una semana después de estos hechos, algunos agentes de Jusapol que entraron en contacto con Ortega Smith aquella mañana han comenzado a manifestar síntomas. Hay quien ya teme, sin remedio, el contagio.
Muchos están ya en cuarentena. En los próximos días se quedarán en casa, y es previsible, aseguran a EL ESPAÑOL fuentes de la asociación, que en los próximos días todos aquellos que se aproximaron al representante político se realicen las pruebas para confirmar o desmentir el contagio.
Las novedades sobre el estado de todos ellos se conocerá en las próximas horas. A última hora de este martes, tras confirmarse el contagio de Ortega Smith, la organización preparaba ya un comunicado que difundirá en las próximas horas.
Aislados en casa
Para evitar que el virus se propague entre quienes mantuvieron contacto con el político madrileño durante estos días, la formación ha pedido a sus miembros restringir su actividad al máximo. Desde Vox insisten en que no quieren “crear alarma sino ser ejemplo para poder erradicar contagio alguno”.
Por ello, los 52 diputados de Vox en el Congreso y numerosos representantes del partido que viajaron a Madrid desde otros territorios de España (Alicante, Ceuta, Murcia, Cantabria, Zaragoza, etc) están aislados en su domicilio, cumpliendo la cuarentena que exige el protocolo sanitario estipulado para combatir la epidemia. El test se realizará únicamente a aquellas personas que muestren síntomas.
"Todos los diputados, asesores y resto de trabajadores se han puesto en cuarentena voluntaria tras conocer el positivo de Ortega Smith con el fin de prevenir futuros contagios", informaba el grupo parlamentario de Vox en la Asamblea de Madrid.
Pero las restricciones no afectan solo a los miembros del partido de derecha radical. El contagio del político madrileño ha obligado a la Mesa del Congreso de los Diputados a suspender toda actividad parlamentaria durante esta semana. El Senado, también como medida preventiva, se ha sumado a la Cámara Baja y ha cancelado los plenos previstos para estos días.
Es decir, el contagio de Ortega Smith ha puesto en cuarentena a todos los grupos parlamentarios autonómicos, así como los de los consistorios de toda la geografía española. De forma irremediable, esa cuarentena, dada la propagación exponencial y casi imparable del virus, hace saltar también las alarmas del resto de formaciones políticas con representación en esos lugares.
Ortega Smith, además de sus labores como diputado y sus responsabilidades como número dos de Vox, también es portavoz del partido en el Ayuntamiento de Madrid. Por ese motivo, el consistorio de la capital ha desalojado este martes el edificio de los grupos municipales para desinfectarlo y ha suspendido los plenos de los 21 distritos.