Las Fuerzas Armadas han emprendido este viernes las labores de control y desinfección en las calles de Pamplona, pero una parte del vecindario del casco antiguo de la ciudad ha rechazado su presencia con una sonora cacerolada al paso de los efectivos del Ejército.
Los militares, desplegados en la Operación Balmis para frenar el avance del coronavirus, llevan algunos días siendo rechazados por los portavoces de EH Bildu, partido que gobernó la ciudad durante la última legislatura y que perdió el poder en las últimas elecciones municipales. Los representantes del partido de la izquierda abertzale han expresado en diversas ocasiones su rechazo a la presencia de los soldados en las calles.
Los efectivos de las Fuerzas Armadas salieron a colaborar esta jornada en Navarra con las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. Como estaba previsto, fuentes de defensa relatan que los efectivos han realizado controles por las calles de la ciudad y también se han centrado en la desinfección de diversos inmuebles.
Sin embargo, se encontraron con una protesta vecinal en pleno centro de la ciudad, muy cerca de la catedral de Pamplona. Los vecinos de las viviendas próximas a la Plaza de la Compañía, el lugar donde aparcaron sus vehículos, comenzaron a golpear en torno a la una de la tarde todo tipo de utensilios de cocina desde sus balcones.
Según la delegación del Gobierno en Navarra, además de estas labores, el plan para la jornada recogía que estos militares colaboraran en el traslado de camas y taquillas a la residencia María Auxiliadora de Pamplona, que se está habilitando para acoger a personas en situación de emergencia.
Quejas de EH Bildu
EH Bildu ha considerado "inaceptable e intolerable" que el Ejército se haya "desplegado" este viernes por la mañana en distintas calles de Pamplona y esté "asumiendo funciones de seguridad ciudadana y de control de la ciudadanía", pese "al comportamiento responsable y ejemplar de la ciudadanía".
Para EH Bildu, "en un claro caso de abuso de autoridad, se dedica a perseguir a algunos ciudadanos y ciudadanas en las calles de Pamplona para exigirles que se identifiquen".
El partido abertzale lleva días criticando el despliegue de las Fuerzas Armadas, y asegura que la presencia del ejército en las calles es una simple coartada. "Con la excusa de la limpieza y la desinfección, hoy en las calles de Pamplona los militares están identificando y registrando a sus ciudadanos, así como entrando en varios comercios".
La coalición abertzale ha afirmado en un comunicado que "este tipo de persecuciones no ayudan a paliar y eliminar las graves consecuencias del coronavirus que está sufriendo Pamplona y, muy al contrario, crean clima de desasosiego entre buena parte de la población". "Lo que estamos viendo en Pamplona parece una mera maniobra propagandística para decir claramente quién manda aquí: los ejércitos".
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