Había gran expectación por escuchar esta mañana al general José Manuel Santiago después de sus preocupantes declaraciones en la rueda de prensa de este pasado domingo. En ella, el Jefe del Estado Mayor de la Guardia Civil, reconoció que entre las distintas misiones de la Benemérita se encuentra la de "minimizar el clima contrario a la gestión de crisis por parte del Gobierno". Lo leyó directamente de los papeles que tenía delante.
Horas después salió el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, a enmendarle diciendo que fue "un lapsus", y esta mañana el general ha vuelto a salir a la rueda de prensa, y en lugar de rectificar en sus palabras de la jornada anterior, decidió exhibir su hoja de servicios tras largos años en la Guardia Civil. "En mis 40 años de profesión, en la lucha contra ETA y en misiones en el extranjero, si hay una cosa que he aprendido es que que lo primero son las personas, no hay ideologías. Todos somos un equipo". Ni una frase de rectificación ante lo dicho.
Acto seguido, ha sido ovacionado por el resto de integrantes del Comité Técnico de Gestión del Coronavirus, que ofrecen desde el inicio de la crisis una rueda de prensa diaria, cada jornada al filo de la media mañana.
Después de sus palabras, Fernando Simón director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias, ha procedido a echarle también un capote, como el resto de sus compañeros: "Sabemos que estamos expuestos a cualquier tipo de crítica, pero esta exposición hace que haya riesgo de que alguna vez las cosas no salgan como uno quiere. Utilizar fallos en nuestro discurso, que estamos al límite, no es algo decente. Espero que la mayoría de los españoles entienda el significado de mis palabras".
Lucha contra los bulos
Las palabras del general Santiago durante la rueda de prensa telemática generaron una nueva tormenta política con múltiples reacciones en todos los partidos políticos. Horas después, para aclarar sus palabras, los servicios de comunicación de la Guardia Civil enviaron un mensaje aclarando que el general se refería a la gestión y proliferación de los bulos.
Santiago destacó que desde el Instituto Armado se estaba trabajando ya en dos direcciones a través de la Jefatura de Información para combatir las noticias falsas: "Por un lado, evitar el estrés social que producen estos bulos, y por otro, minimizar el clima contrario a la gestión de crisis por parte del Gobierno". "Todos estos bulos los tratamos de desmentir por nuestras redes sociales", ha señalado.
Las rectificaciones no evitaron una oleada de críticas de los partidos de la oposición frente a lo que entendieron como un control a la prensa y a la libertad de crítica al Gobierno. PP, Vox y Ciudadanos pidieron al momento comparecencias parlamentarias de responsables de Interior y dimisiones después de esas declaraciones.