Una investigación en el seno de la Guardia Civil está en marcha desde hace días para tratar de dilucidar quién filtró las diligencias del caso que se está investigando en los juzgados en relación al 8-M. En Interior quieren llegar hasta el final para saber a ciencia cierta cómo se produjeron esas filtraciones de los informes encargados por la juez Carmen Rodríguez Medel a la Policía Judicial.

Todo ello guarda relación con el fulminante cese del coronel Diego Pérez de los Cobos, jefe de la Comandancia de Madrid, tras negarse a facilitar a altos cargos del ministerio informes solicitados por la magistrada. Esos informes tenían que ver con la actuación del gobierno de Pedro Sánchez durante el 8-M, a las puertas de la explosión de la pandemia del Covid-19.

Según fuentes del ministerio, hace días que se abrió una información reservada para investigar los hechos. Se trata de un procedimiento habitual ante este tipo de situaciones. En este caso la filtración del primer informe hace 15 días y la del segundo, un documento de 295 páginas, esta misma semana. Ambos documentos solo se trasladan a las partes personadas en el proceso y la titular del juzgado de Instrucción 51 de Madrid advirtió a los agentes de que solo se comunicasen directamente con ella.

Por eso ahora Pérez de los Cobos, a quien el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, apuntó esta misma semana en sede parlamentaria por estas fugas de información en el proceso judicial, se encuentra en el punto de mira de las indagaciones que promoverá David Blanes, su sustituto al frente de la comandancia.

Marlaska ha ofrecido en total hasta cuatro versiones diferentes sobre el cese del coronel. En la última, esta misma semana, lo justificaba aludiendo a que esas filtraciones habrían sido la razón de que Pérez de los Cobos fuese apartado de manera fulminante de su cargo. Lo dijo el martes en el Senado y el miércoles en el Congreso de los Diputados. "Una filtración es un delito".

Improvisación

Las argumentaciones de Marlaska con respecto al cese del máximo responsable de la Benemérita en Madrid han divagado desde la "pérdida de confianza" hasta la reestructuración de los equipos. Este hecho último, apuntan fuentes internas del cuerpo a EL ESPAÑOL, se cae por su propio peso al comprobar que no tenían a nadie pensado para ocupar el puesto de Pérez de los Cobos. "Si tan pensada tenían esa reestructuración, ¿cómo es que tardan una semana en nombrar a alguien en el puesto del coronel?".

Ahora David Blanes, hasta el momento jefe de la Guardia Civil en Barajas, será quien dirija las pesquisas que se han encargado desde la cúpula del ministerio. Por el momento ya se han hecho gestiones relativas a pruebas informáticas y comprobaciones de correos electrónicos.

El número dos de De los Cobos, Eduardo Gómez, no podía dirigir la investigación al respecto ya que no solo era hombre de confianza del coronel, sino que pidió el traslado en cuanto se produjo el cese fulminante y sorpresivo de su superior hace escasas dos semanas. 

El contenido del segundo de los informes, que medios como EL ESPAÑOL han publicado a lo largo de esta semana, incluye la grabación a la ministra Irene Montero en un "off the record" previo a una entrevista con la ETB el pasado 9 de marzo, solo 24 horas después de las manifestaciones del 8-M.

Por el momento, la magistrada Rodríguez Medel ha imputado al delegado del Gobierno en Madrid, José Manuel Franco, un presunto delito de prevaricación por permitir esta concentración multitudinaria y muchas otras en aquellos días en los que la crisis sanitaria del coronavirus no hacía más que estallar.

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