La acusación popular de Vox ha retirado la mañana de este martes la acusación de organización criminal para los exmiembros de la Mesa del Parlament y la exdiputada de la CUP Mireia Boya durante el trámite de cuestiones previas en el juicio por presunta desobediencia en el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC).
En su turno de intervención, el abogado de Vox, Juan Cremades, ha explicado que retiran esta acusación, por la que pedían 12 años de cárcel para los acusados, y mantienen la de presunta desobediencia, después de la sentencia de la Sala Segunda del Tribunal Supremo por el proceso soberanista, que excluyó este delito.
La abogada de los exdiputados Ramona Barrufet, Lluís Corominas y Lluís Guinó (JxSí), Judit Gené, a la que se han adherido las defensas de las otras dos acusadas -Anna Simó y Mireia Boya-, ha tachado de "temerario y osado, y no acorde a las normas de la buena fe procesal" haber mantenido esta acusación hasta la celebración del juicio.
Ha recordado que antes de la sentencia del Supremo, el alto tribunal ya apuntaba, en el auto de declinación de jurisdicción del 27 de diciembre de 2018, a que los cinco acusados solo responderían por un delito de desobediencia en esta causa.
La abogada ha afirmado que Vox pretendía "mantener el titular" de los 12 años de cárcel al mantener la acusación por este delito, según ella infundado.
Ha avanzado que si hubieran mantenido esta petición hasta las conclusiones del juicio, hubieran pedido la condena en costas para la acusación popular.