Mónica Gracia Sánchez ingresó en la Policía Nacional en el año 1994. Es subinspectora del cuerpo y está destinada en el Aeropuerto del Prat de Barcelona. A su vez ostenta el cargo de Secretaria General del Sindicato Unificado de Policía (SUP) desde el año 2013.
En los últimos días, policías y guardias civiles han visto cómo sus nóminas han crecido de un modo notable en relación a las de los meses anteriores. Ello es así porque ha llegado ya ese ajuste de los funcionarios de ambos cuerps hasta prácticamente igualar su salario al de sus compañeros de Mossos d'Esquadra. Tanto la Benemérita como la Policía Nacional empiezan a percibir 1.200 euros más de una sola tacada.
La retribución ha sido en parte notable debido a los 10 meses de retraso durante los cuales la equiparación ya tenía que haberse ejecutado. En este contexto, la secretaria genera del sindicato se sienta a hablar con EL ESPAÑOL sobre los recientes acuerdos efectuados en el terreno de la equiparación salarial.
El cobro del tercer tramo del acuerdo de equiparación salarial ya se ha hecho efectivo a finales de este mes de noviembre. ¿Qué valoración hacen?
Una muy positiva por dos motivos. En primer lugar, porque en plena pandemia por el Covid-19 y ante una crisis económica nunca antes vista en nuestro país y que tendrá consecuencias en el nivel de endeudamiento de las Administraciones durante años, hemos logrado convencer al Gobierno de lo esencial que resultaba cumplir el compromiso adquirido en marzo de 2018 y ejecutar la totalidad de los incrementos salariales para los policías.
¿En qué se está traduciendo?
El gasto en seguridad es una inversión para, en tiempos muy difíciles, proteger a la sociedad, garantizar sus derechos y ayudar en todo lo que se nos pida para que este virus no se abra paso. En segundo lugar, porque ha supuesto que este mes, entre el pago del tercer tramo y sus atrasos, se perciban entre 1.400 y 1.500 euros.
¿Cómo queda entonces la nómina de un policía?
Tal y como dijimos cuando firmamos el acuerdo, el incremento medio mensual en sus nóminas ha sido de 561 euros brutos. Mientras que el resto de funcionarios han visto cómo sus salarios crecían estos tres años un 6,25%, en nuestro caso ese aumento ha sido de casi un 20%. Hasta tres veces más que el resto. El dinero invertido en el acuerdo de la equiparación salarial de Policía Nacional y Guardia Civil supone el 9,6% del presupuesto total que tenía el Ministerio del Interior en 2018 y el 18% de la partida que se dedicaba ese año al pago de las nóminas de ambos Cuerpos de seguridad. Por tanto, estamos ante la mejora salarial más importante de la historia moderna de nuestro Cuerpo, desde la llegada de la democracia. Y eso fue posible gracias a la negociación responsable que mantuvimos durante muchos meses con el entonces ministro de Interior, Juan Ignacio Zoido, y a la exigencia de cumplimiento de los términos que hemos trasladado a su sustituto, Fernando Grande-Marlaska.
¿Cree que con este acuerdo se alcanza realmente la equiparación total?
Ese era el objetivo. El acuerdo nunca se concibió como una estación de final de trayecto sino como el inicio de un camino para alcanzar ese objetivo. Nadie puede negar que 561 euros mensuales de mejora media en una nómina no sea un avance muy significativo y considerable en esa senda de la equiparación. Nadie puede negar que esa parte central del acuerdo no se haya cumplido, tramo a tramo, en los términos en los que se firmó. El concepto equiparación implica la existencia de dos términos a comparar y el SUP siempre ha exigido que esa parte del trabajo técnico formase parte del acuerdo para, precisamente, conocer si en realidad era necesario más dinero para las nóminas de los agentes.
Inversión
¿Es suficiente la inversión que se hace?
Nosotros tenemos claro que hace falta más inversión y por eso mantenemos reivindicaciones como la reclasificación de la Escala Básica de Policía Nacional en el Grupo B de la función pública, que supondría una mejora mensual media de más de 132 euros brutos y un incremento significativo de los haberes reguladores que se utilizan para el cálculo de la pensión de jubilación. También queremos mejoras económicas para otras Escalas, como la dignificación de la figura del Inspector investigador dotándole de un mayor complemento de destino (entre el 25 y 26) y la potenciación de las plazas de Subinspector con nivel 24 (ahora muy limitadas en cuanto a su despliegue pese a la alta responsabilidad que asumen).
No parece que los sindicatos policiales logren ponerse de acuerdo entre sí.
Ha sido decepcionante comprobar que ha habido compañeros que crearon un proyecto basado en la división, el insulto y la mentira. En el SUP hemos sufrido injurias, calumnias, acoso y señalamiento por hacer nuestro trabajo, por mejorar como nunca antes se hizo el sueldo de un policía. Se ha intentado sabotear la negociación que permitió firmar este acuerdo y su posterior ejecución. Pero nada nos ha distraído y hemos volcado nuestras fuerzas en trabajar y ofrecer a los policías avances en sus retribuciones que ya cobran todos los meses. Se llegó a decir que el acuerdo supondría una mejora neta de 80 euros mensuales. Luego se añadió que no se cobrarían los tres tramos por la crisis. Posteriormente, se intentó forzar el porcentaje de reparto entre Cuerpos para perjudicar a los policías. Han fracasado porque la verdad se ha abierto paso y ha despejado el camino de demagogias y malas prácticas sindicales. Nosotros seguimos trabajando para los policías, por sus derechos, desde la unidad. Otros se han especializado en la división y el enfrentamiento, con cero resultados.
¿Con el cobro de los tres tramos se cumple el acuerdo firmado con Interior?
No. Por supuesto que no. No se ha logrado todavía la equiparación. Quedan pendientes de ejecución dos cláusulas que son vitales. La que permite a los compañeros en situación de segunda actividad regresar a la actividad operativa para percibir estas nuevas nóminas aumentadas gracias al acuerdo. Y sobre todo, la que suponga aprobar una Ley de Retribuciones para evitar que las nóminas de los policías nacionales sean inferiores a los de profesionales de otros Cuerpos de seguridad.
Sustituiría al actual Real Decreto de Retribuciones del año 2005.
Claro, y es la vía más solvente frente a otras iniciativas, como una iniciativa legislativa popular rechazada en el Congreso y que estaba abocada a su fracaso por la mala calidad técnica de sus redactores. Son dos prioridades sindicales a corto plazo, junto con la reforma del catálogo de puestos de trabajo para eliminar desigualdades, homogeneizando al alza algunas diferencias retributivas, y la reclasificación de la Escala Básica del Cuerpo en el Grupo B de la función pública, junto con la potenciación de mejoras económicas para el nivel de complemento de destino de Subinspectores e Inspectores.