El Ministerio de Sanidad ha rechazado adelantar el toque de queda a las 20.00 horas, tal y como pedían varias comunidades autónomas por la incidencia de la Covid-19 en esta tercera ola.
Según han informado fuentes de la reunión del Consejo Interterritorial a EL ESPAÑOL, el ministro de Sanidad ha trasladado a las comunidades que "las herramientas que hay son suficientes para bajar la curva" y, lo que hay que hacer, es aplicarlas "al máximo y esperar los resultados".
La decisión se ha tomado después de que Castilla y León decretase adelantar a las 20.00 horas la prohibición de salir a la calle a los ciudadanos y varias comunidades autónomas se postularan a favor de su medida. Además, el Gobierno ha recurrido ante el Supremo la iniciativa de Castilla y León, que está a la espera de una resolución.
No solo las comunidades autónomas del PP han pedido adelantar el toque de queda. El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha presentado una iniciativa similar y Ximo Puig, desde la Comunidad Valenciana, también ha asegurado que, si pudieran, ellos también confinarían por obligación a la población antes de las 22.00 horas.
Sin nuevo estado de alarma
La principal preocupación a la hora de modificar el horario del toque de queda es tener que volver a votar un nuevo decreto de Estado de Alarma. Para ello, haría falta la mayoría de los apoyos del Congreso de los Diputados.
Con todo ello, las comunidades autónomas tendrán que seguir poniendo en práctica la misma estrategia que en el mes de octubre con la segunda ola.
Esto significa que usarán el documento del plan de respuesta temprana elaborado conjuntamente con Sanidad para contener la transmisión del virus. El citado proyecto tiene una serie de indicadores como la incidencia acumulada o la saturación hospitalaria que marcan el riesgo de la pandemia.
Entre las medidas está cerrar la hostelería, cosa que algunas regiones sí han hecho ya; los centros comerciales o limitar las actividades de ocio como los teatros, museos o cines.
En el transcurso de la rueda de prensa posterior al Consejo de Interterritorial del Sistema Nacional de Salud, el ministro de Sanidad ha reiterado su rechazo a la petición de las comunidades autónomas. Ha añadido que varias regiones han planteado el problema de concentrar a la población en franjas tan escasas.
Acusado de haber tomado esta decisión influido por el número de escaños del PSOE para sacar adelante un nuevo estado de alarma y su candidatura a la presidencia de Cataluña, Illa ha negado la mayor.