Sanidad ultima la creación de Medicina Forense y Legal a la espera de más especialidades vía MIR

El Ministerio de Sanidad se ha puesto las pilas y quiere modernizar más pronto que tarde la formación sanitaria especialidad de este país. Por ello, tras publicar su nuevo modelo para crear especialidades sanitarias, ha culminado el periodo de consulta pública de la que será la nueva especialidad de Médica Legal y Forense y el cambio del programa formativo de Medicina Nuclear.

Ambos proyectos formativos, de cuatro años de duración, han cerrado esta semana sus últimos flecos legales con el objetivo de cerrar su programa formativo para la próxima convocatoria MIR. Aunque Forense será la primera nueva especialidad MIR 2022, hay que recordar que tienen un bagaje previo a la ley para crear más especialidades sanitarias, en la que también está trabajando Sanidad.

La especialidad de Medicina Legal tiene el consenso de la amplia mayoría del sector sanitario. Tanto especialistas como colegios profesionales ven bien su puesta en marcha aunque, si querían hacer alguna precisión sobre su parte más técnica, lo han podido hacer hasta el pasado jueves.

Lo que ocurre con la especialidad es lo contrario a, por ejemplo, la futura nueva especialidad de Urgencias y Emergencia, Genética clínica o infectología. Aunque la especialidad de Urgencias ha sido muy reclamada por algunos sectores de la sociedad y grupos políticos, tiene sus detractores. Sobre todo, especialistas de áreas competenciales similares al programa formativo que vertebraría la especialidad de Emergencias, como Intensiva y Medicina de Familia.

Nueva especialidad

En el caso de la especialidad en Medicina Legal y Forense, estará ligado al Ministerio de Justicia y tendrá un período formativo de cuatro años que serán cursados en las unidades docentes acreditadas de los Institutos de Medicina Legal y Ciencias Forenses dependientes del Ministerio de Justicia o de las comunidades autónomas con competencias transferidas y también en los centros hospitalarios de referencia. 

Aunque esta será una especialidad MIR, Sanidad ha aclarado que existe la posibilidad de acceder, de forma extraordinaria, al título de especialista en el caso de los funcionarios de carrera e interinos. Para ello, tendrán que haber prestado un período mínimo de servicios a la Administración de Justicia como médicos forenses, de cinco años, y que hayan accedido a estos puestos de trabajo antes de la entrada en vigor de la exigencia de la especialidad.

Además, el título de especialista en Medicina Legal y Forense adquirido antes de la entrada en vigor del presente real decreto, tendrá la misma validez que el adquirido por el sistema de Residencia.

Real Decreto

Tras la aprobación de ambas especialidades, vigentes en la siguiente convocatoria, Sanidad espera tener listo el Real Decreto por el que se regulará la creación nuevas especialidades que tendrá más áreas de capacitación (especialidades dentro de especialidades) y se sustentará sobre un modelo más dinámico (con revisiones cada poco tiempo).

Tal y como adelantó EL ESPAÑOL el pasado abril, con el nuevo especifica que, para crearse un nuevo título formativo, este debe responder a criterios "como las necesidades de salud de la población o la evolución de los conocimientos científicos y tecnológicos".

Tanto para el título de especialista como para las ACE, Sanidad no concreta si los proyectos como la creación de la especialidad de Urgencias y Emergencias se harán efectivos, aunque sí abre la puerta a empezar a tramitar su creación. 

Para que se pueda crear tanto la especialidad y como la ACE, se debe de plasmar la necesidad de esta especialización con un resumen ejecutivo. Además, se debe asegurar que no invade competencias de otras especialidades y que existe una experiencia de más de cinco años de esas funciones concretas.

Hay tres órganos que puedan proponer la creación de una especialidad sanitaria: el propio Ministerio (desde la Comisión Nacional de Especialidades), las comunidades autónomas y una "o varias" sociedades científicas.

Cada diez años se evaluará si las especialidades vigentes en España son necesarias y, si no es así, se podría eliminar las mismas. Para ello, el Real Decreto estipula que se debe elaborar un informe de viabilidad con la correspondiente evolución de los conocimientos científicos que aporta.