La concesión de los indultos a los líderes independentistas condenados por sedición se acerca. No se descarta incuso que se produzca en una de las próximas reuniones del Consejo de Ministros, bien el martes 22 o el 29, el último del mes. Y para el primer partido de la oposición este particular tic tac, lejos de aplacar a los separatistas catalanes, les "envalentona".
Así lo aseguran fuentes de la dirección nacional de los de Pablo Casado, donde siguen convencidos de la masiva oposición de la ciudadanía a lo que creen la concesión de "más cesiones a cambio de tiempo para Pedro Sánchez". Cesiones entre las que incluyen el voto del Grupo Socialista este martes en el Congreso a la despenalización de las injurias al Rey propuesta por Unidas Podemos.
Y en medio de este panorama, este miércoles Casado llegaba a Barcelona para asistir a la cena ofrecida por el Rey junto al presidente de Corea del Sur, Moon Jae-in, en la que supone la primera visita de Estado a nuestro país de un mandatario extranjero desde antes de la pandemia.
Una cena boicoteada por Pere Aragonés, algo que ya se produjo en tiempos de Quim Torra y que los populares consideran un trato al monarca que los españoles "no aceptarán". Todo ello unido, comentan, a la próxima reunión anunciada por el presidente catalán con Carles Puigdemont o a declaraciones del propio Aragonés sobre sus planes secesionistas independientemente de la concesión de la medida de gracia a Oriol Junqueras, el líder de ERC, y el resto de encarcelados.
Sánchez lo lamenta
Por su parte, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, lamentaba la ausencia en la cena de Aragonés, aunque sin nombrarle expresamente.
"Desde luego, cuando estamos hablando de que hay una visita de Estado tan importante como la del presidente de Corea del Sur en Barcelona, pues sería bueno y deseable que estuvieran todas las instituciones públicas representadas" señalaba el jefe del Ejecutivo en una rueda de prensa conjunta en Madrid con la presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen, en la que ambos daban cuenta del Plan de Recuperación de 70.000 millones de euros para España.
Finalmente sí hubo foto con Aragonés, pero también desplante. La representación de la Generalitat en la cena con el jefe del Estado había recaído finalmente en la consejera de presidencia, la republicana Laura Vilagrá, tras haberse dicho en un primer momento que sería el vicepresidente del Govern, Jordi Puigneró, de Junts Per Catalunya. Es decir, cada vez menor rango para acompañar al Rey.
Pero antes, durante la XXXVI reunión del Cercle d'Economía, el presidente catalán y la alcaldesa de la Ciudad Condal, Ada Colau, evitaban recibir protocolariamente a Felipe VI, cosa que hacía el Mayor de los Mossos d'Esquadra, Josep Lluis Trapero, junto al presidente del Cercle, Javier Faus, y la delegada del Gobierno en Cataluña, Teresa Cunillera.
Posteriormente, Aragonés y Colau coincidían con el Rey y el presidente coreano durante unos minutos y conversaban, informa Crónica Global, una charla a la que se sumaba la vicepresidenta segunda del Gobierno, Nadia Calviño.
La conversación se producía por espacio de tres minutos, con algunos empresarios presentes y también la delegación del presidente surcoreano. En ese momento, Aragonés y Colau llevaban ya media hora en el recinto, sin haber salido al encuentro del jefe del Estado. El Estado del que Aragonés es, en Cataluña, el máximo representante.