La Sociedad de Estudios Militares de la ANC entrena "comandos" y diseñó un ejército catalán

La asociación presentó en 2018 un proyecto para dotar a Cataluña con un Ejército de 48.000 hombres, con el fin de defenderse de las "amenazas" exteriores. Según su propuesta, este Ejército militar debe contar con una Armada de entre 14 y 16 buques de guerra, así como una Fuerza Aérea con 70 aviones, incluyendo helicópteros y 30 cazas. 

La Societat d'Estudis Militars (SEM) ha celebrado en Cataluña, por segundo año consecutivo, su Escuela de Verano en forma de campamento, en el que una veintena de jóvenes se han sometido a un entrenamiento similar al que realizan "los cuerpos de élite de los ejércitos", según la propia asociación.

Además de duras pruebas físicas y maniobras militares, la Escuela de Verano ha incluido charlas sobre la "producción y tenencia de armas en Cataluña", sobre el sitio de Barcelona en la Guerra de Sucesión (que los independentistas sitúan como el inicio de la "ocupación" de Cataluña por parte de la Monarquía española) y sobre las estrategias militares de Julio César y Napoleón.

Esta vez gana Argentina

Por último, la propia SEM explica que sus colonias militares han incluido una competición entre sus participantes inspirada en la Guerra de las Malvinas de 1982 en la que, esta vez, ha ganado Argentina.

El grupo independentista que desde hace dos veranos organiza estas colonias para entrenar "comandos" nacionalistas, la Societat d'Estudis Militars (SEM), ha estado estrechamente vinculado a la ANC, que fue uno de los principales motores del referéndum de independencia del 1-O.

La SEM reprochó el pasado mes de junio a ERC y Junts, en un comunicado, que no hayan incluido ningún tipo de propuesta de "políticas de defensa" en el pacto de gobierno que ha llevado a Pere Aragonés a la Presidencia de la Generalitat.

La asociación, dirigida por Pol Molas, ha elaborado en los últimos años varios informes teóricos para diseñar el Ejército de la "República catalana". En 2018 presentó el documento titulado "Defender una Cataluña independiente". Lo firma el coronel retirado del Ejército irlandés Dorcha Lee.

Cazas y misiles SAM

"El 18 de septiembre de 2014, cuando los escoceses votaron permanecer en el Reino Unido, cerré mi carpeta sobre la Defensa escocesa y abrí una nueva sobre la Defensa de Cataluña", explica el militar irlandés en el preámbulo.

El documento propone para Cataluña unas Fuerzas Armadas de 48.000 hombres, de adscripción voluntaria: 24.000 en el Ejército de Tierra, 16.000 en la Armada y otros 8.000 en la Fuerza Aérea. 

Portada del informe presentado en 2018 por la Societat d'Estudis Militars (SEM).

A su juicio el Ejército de Tierra de la hipotética República catalana debe contar con tres batallones mecanizados de infantería, uno de tanques y otro de artillería (con morteros pesados y misiles SAM tierra-aire), así como compañías de reconocimiento, ingenieros, telecomunicaciones, Policía Militar y un batallón de logística.

La Fuerza Aérea catalana será más ambiciosa: debe contar con 70 aeronaves, incluyendo un ala de combate con 30 cazas F16, un ala de helicópteros, un ala de transporte aéreo para las tropas, aviones de vigilancia marítima y de entrenamiento. 

"Cascos azules" catalanes

Por último, la Marina Catalana (MC) contaría con entre 14 y 16 buques de guerra para defender sus "aguas territoriales", incluyendo dos fragatas, cuatro cazaminas y barcos de patrulla costera. Todo ello exigiría una inversión equivalente al 1,2% del PIB de Cataluña, dentro de los parámetros exigidos por la OTAN.

Aunque el estudio del coronel Dorcha Lee parte del supuesto de que Cataluña obtendrá la independencia de forma pactada con el resto de España, señala que esta fuerza militar de 48.000 hombres debe asumir misiones como la "defensa de Cataluña contra agresiones armadas", la participación en operaciones internacionales de paz, las labores de búsqueda y rescate, y participación en labores de emergencia ante desastres naturales.

El informe enumera otras amenazas como el terrorismo internacional, la "migración no controlada", los ciberataques, los desastres naturales causados por el cambio climático, las epidemias y pandemias, las armas de destrucción masiva, los ataques contra sus líneas comerciales y de telecomunicaciones, y una posible "invasión" de un enemigo al que en ningún momento menciona.

Para tomar parte en las misiones de paz de la ONU, propone reservar un batallón mecanizado, una compañía de transporte de tropas, un escuadrón de cazaminas, buques de guerra para la lucha contra la piratería, así como grupos de observadores, desactivación de explosivos y unidades especializadas de Policía Militar.