El perímetro fronterizo de Melilla ha registrado esta madrugada una alta presión migratoria por la aproximación de unos 400 subsaharianos que han intentado saltar la valla por distintas zonas, aunque la actuación de la Guardia Civil y las fuerzas de seguridad marroquíes ha impedido que alguno lo lograra.
Fuentes de la Delegación del Gobierno en Melilla han informado de que sobre las 4.15 horas se detectó una aproximación al perímetro fronterizo de un grupo de unos 400 subsaharianos.
Los migrantes, de forma organizada, se han dividido en tres grupos para saltar a la vez el vallado por distintos puntos de la zona norte.
El dispositivo antiintrusión coordinado por la Guardia Civil, así como la colaboración de las fuerzas de seguridad de Marruecos, han frustrado la entrada, impidiendo, además, los sucesivos acercamientos, por lo que no se ha producido ninguna entrada irregular a la ciudad.
Según la Delegación del Gobierno, los migrantes han mostrado “violencia” en su intento de entrada irregular a Melilla con el lanzamiento de piedras y otros objetos contra la Guardia Civil, si bien ningún agente ha resultado herido.
Se trata del segundo intento de entrada en tres días, ya que el pasado martes, día 21, más de 50 subsaharianos trataron de saltar la valla por la zona del Río Nano y 10 lograron entrar a Melilla.