El líder de Vox, Santiago Abascal, ha promovido este viernes en Brasil una "alianza de todos los patriotas del mundo" como parte de una visita que dijo tenía como objetivo aprender de una "nación que no se rinde".
Abascal llegó a Brasil para reunirse con el presidente Jair Bolsonaro, pero hasta la pasada noche no hubo confirmación oficial de ese encuentro entre el político y el gobernante ultraderechista brasileño.
"Los patriotas de ambos lados del Atlántico tenemos la responsabilidad histórica de brindar a nuestros pueblos un horizonte de prosperidad", afirmó Abascal en un foro titulado "Brasil Profundo" celebrado en la ciudad oriental de Várzea Grande.
En su discurso, Abascal utilizó sus habituales argumentos para alertar sobre la "amenaza narcocomunista" y la "cultura del marxismo", a la vez que defendió "los valores supremos de la tradición, la autoridad, la jerarquía y la mancomunidad".
"No han podido con Brasil ni con España los movimientos separatistas", agregó.
Tuvo escasas alusiones al presidente Bolsonaro, pero sí destacó que Brasil "ha sabido plantar cara" al expresidente Luiz Inácio Lula da Silva y ha sabido defender sus derechos frente a quienes dicen a las naciones "cómo tienen que legislar y cómo tienen que vivir".
La principal figura del acto fue uno de los hijos del presidente Bolsonaro, el diputado Eduardo Bolsonaro, que cerró el foro después del discurso de Abascal y que previamente había participado en un debate junto con el eurodiputado español de VOX Hermann Tertsch.
En ese debate, Tertsch utilizó argumentos parecidos a los que defendió después Abascal, y ante la audiencia aseguró que en la comisión de Medio Ambiente del Parlamento Europeo es "prácticamente el único" que defiende al presidente Bolsonaro.
Vox había indicado en Madrid que en su visita a Brasil Abascal tenía programado presentar al presidente Bolsonaro "la alianza patriótica en torno a la Carta de Madrid", una iniciativa que ese partido asegura han firmado "más de 150 dirigentes internacionales y más de 10.000 personas en todo el mundo".
La agenda oficial del presidente Bolsonaro no ha dado cuenta de ninguna reunión con Abascal y tampoco ha habido informes sobre la posibilidad de que el político español y el gobernante ultraderechista brasileño hayan tenido una entrevista reservada.