El Gobierno se ha asegurado la aprobación de la reforma laboral con mayoría absoluta tras el sí de PDeCAT y UPN, sumando así 176 votos, una información que adelantó EL ESPAÑOL la semana pasada.
A pesar de que Yolanda Díaz había puesto todos sus esfuerzos en conseguir el apoyo de ERC, PNV y Bildu, finalmente serán los seis diputados de PDeCAT y UPN los que permitan a Moncloa sacar adelante su reforma laboral.
Tras varias semanas de conversaciones discretas en pasillos y despachos del Congreso, mensajes de WhatsApp e incluso desplazamientos por España de los negociadores a la sede de alguna de las formaciones, al PSOE ya le salen las cuentas.
El portavoz del PDeCAT en el Congreso, Ferrán Bel, ha informado este miércoles en una rueda de prensa de que los cuatro diputados de su partido votarán a favor de la convalidación en el Congreso de la reforma laboral.
En su comparecencia, Bel ha destacado que el PDeCAT llevaba en su propio programa electoral la aprobación de una reforma consensuada en el diálogo social, por lo que ha justificado el respaldo de su formación a esta reforma.
Además, ha realizado una valoración "positiva" del contenido, tanto la recuperación de la ultraactividad como la prevalencia del convenio de sector respecto al de empresa, pero también de las cosas que esta reforma, ha dicho, no modifica, como la indemnización por despido, o el régimen de salarios de tramitación, "líneas rojas" para esta formación, ha dicho.
El presidente de UPN, Javier Esparza, ha anunciado que la formación regionalista apoyará la reforma laboral que se debatirá este jueves en el Congreso de los Diputados, y lo hará con "convencimiento" y por "responsabilidad y sentido de Estado".
"Lo cómodo era votar 'no'. Pero lo imprescindible para traer prosperidad es votar 'sí'", ha anunciado este miércoles en rueda de prensa, donde ha asegurado que "si esta reforma no se aprueba, pierde España".
Tras subrayar que "es evidente que el Partido Socialista no merece" el apoyo de UPN, ha remarcado que "España y Navarra siempre lo van a tener" y que, con sus luces y sombras" la reforma "es positiva para España y Navarra".
"Sin el apoyo de UPN, no se aprobaría, y pondríamos en riesgo la llegada de los fondos de la Unión Europea, que nos tienen que servir para hacer frente a la recuperación económica, y tiraríamos por la borda un acuerdo histórico entre los sindicatos más representativos de este país y la patronal", ha subrayado.
"Sin tocar una coma del decreto", Ciudadanos aportaría nueve votos, tay como ha confirmado Edmundo Bal, que se unen a los cuatro del PDeCAT, ya confirmados. Además, los dos de Coalición Canaria, los tres de Más País-Compromís "y los dos de Navarra +, que ya sabemos que no votarán en contra", suman los 21 votos que necesita el Ejecutivo para sumar a sus 155 escaños.