La inteligencia rusa podría usar los móviles de los refugiados para "espiar" en los países que les acojan

"El refugiado no sabe que lleva consigo, en su móvil y en su portátil, una herramienta de control y espionaje tuneada por su propio enemigo". Esta inquietante conclusión queda recogida en el documento elaborado por la Asociación Mediterránea de Peritos de las TIC (ASPERTIC).

En ese informe, los expertos describen cómo los equipos electrónicos utilizados en Ucrania son potencialmente peligrosos para la seguridad nacional de los países de acogida, porque sus componentes de seguridad no se ajustan a los mínimos exigidos por la legislación comunitaria. 

"Después de los primeros análisis es preciso advertir del riesgo de que estos ordenadores y teléfonos se conecten masivamente a las redes de comunicaciones de la Unión Europea; sea de empresas o de Administraciones públicas. Sólo recordemos lo fácil que es entrar en una red a través de wifi", aslertan desde ASPERTIC.

Según el informe elaborado por esta asociación, las compañías tecnológicas son "absolutamente colaborativas" en la instalación de puertas traseras o a la hora de "realizar agujeros de seguridad a requerimiento de los diferentes gobiernos o agencias en sus programas y servicios".

"Las grandes tecnológicas no solo han sido elementos colaborativos con los países del llamado bloque occidental", insisten. A su juicio, se han comportado igual con Rusia y con China, "colocando puertas traseras y agujeros de seguridad a petición de la potencia requiriente, cuando el producto se ha vendido en sus áreas de influencia. Normalmente, se instalan aprovechando las actualizaciones".

Nuevo y peligroso troyano

Los peritos de esta asociación aseguran que en las últimas semanas han empezado a detectar "una generación de nuevo malware [virus]". Especialmente advierten sobre el bautizado como SysJoker. "Es un RAT, es decir, un troyano que se controla de forma remota, extremedamente raro y peligroso", explican. Ese virus podría infiltrarse con facilidad en los sistemas informáticos de diversas compañías, sin que los antivirus lo detecten.

Aparte de la detección de este nuevo y peligroso softwere intrusivo, desde ASPERTIC denuncian que "diariamente" se estarían recibiendo "centenares de ataques con peligrosísismo malware". Esos ataques tendrían como víctimas, según esta asociación de peritos informáticos, las empresas y administraciones españolas y europeas.

La situación creada por la llegada de refugiados que huyen de las bombas de Putin sería susceptible de contribuir a la invasión de estos virus. "Sólo por dar un dato: cada día, desde hace tres semanas, llegan sólo a la ciudad de Barcelona más de doscientas personas. Los jóvenes y adultos, todos con su móvil, y una buena parte, con su portátil", señalan.

Amenaza cibernética

El incremento de estas amenazas en el ámbito del ciberespacio ha sido constatado en las últimas semanas por los servicios del Centro Nacional de Inteligencia (CNI) dedicados por completo a esta materia.

Tal y como relató EL ESPAÑOL, España lleva semanas, incluso antes del inicio de la guerra en Ucrania, sufriendo ciberataques dirigidos "a influir o alterar opiniones haciendo un uso intencionado, y generalmente planificado y organizado, de información dirigida a socavar la seguridad y estabilidad de los ecosistemas que conforman la sociedad".

Un documento publicado a finales del pasado mes de enero por el Centro Criptológico Nacional (CCN), la sección del CNI dedicada a luchar contra las amenazas en el ciberespacio, apuntaba a Rusia como la potencia que estaría detrás de esos ataques.

A renglón seguido, el documento hacía referencia a dos grupos de hackers "asociados a los servicios secretos" del Kremlin, "probablemente patrocinados por el Gobierno ruso". 

Este trabajo quedó además refrendado por las palabras de la ministra de Defensa, Margarita Robles, que la semana pasada reveló en la Comisión de Defensa del Congreso de los Diputados que la alerta en el ciberespacio se acababa de incrementar al nivel tres (sobre cinco).

"Se han aumentado los medios de vigilancia de las redes básicas, especialmente las procedentes de Rusia y Ucrania. Se ha creado el Comité de Ciberseguridad bajo el comité de crisis de Presidencia del Gobierno, dirigido por el Centro Criptológico Nacional", explicó Margarita Robles.

Las agresiones rusas en ese ámbito también preocupan en gran medida en la OTAN, que hace unos días pidió a sus empleados extremar las precauciones. Así, las medidas de vigilancia se han acrecentado en todos los cuarteles, hasta el punto de exigir que se evite trabajar en las memorias de los ordenadores de las oficinas.