El PP exige al Ministerio del Interior que los opositores a la Policía Nacional que fueron excluidos tras corregirse sus exámenes en contra del criterio de la RAE puedan proseguir el proceso.
Se trata de varios centenares de miembros de la promoción 38. Unos 300 de ellos presentaron recursos de alzada contra la decisión de la Dirección General de Policía de considerarles "no aptos" tras el test de ortografía.
Este organismo, dependiente del ministerio que dirige Fernando Grande-Marlaska, evaluó sus pruebas y corrigió varias palabras en contra del criterio de la Real Academia de la Lengua.
Los recursos fueron presentados el pasado 25 de febrero. Teóricamente, la Administración tiene tres meses para contestarlos. Y dicho plazo ha terminado este miércoles, 25 de mayo.
Por ello, la diputada del Partido Popular Ana Vázquez ha registrado dos preguntas dirigidas al departamento de Grande-Marlaska.
"¿Qué va a hacer el Ministerio del Interior con los aspirantes a policías nacionales injustamente excluidos en la prueba de ortografía en este año 2022?", reza el escrito. "¿Va a permitir que continúen el proceso de selección y con qué promoción?", añade. El Gobierno, ahora, deberá contestar a la diputada popular por escrito.
Misma situación
La promoción 38 va camino de repetir el mismo recorrido judicial que la número 36, a cuyos opositores, a inicios de mayo, una sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) dio la razón. Interior, además, optó por no impugnarla ante el Supremo, por lo que se convirtió en firme.
Aquella resolución, en base a otro informe de la RAE, concluyó que los opositores habían dilucidado correctamente si los términos ciberataque, LGTBI, reditar y preminente estaban o no en el diccionario.
"Sería un completo sinsentido que consideráramos palabras incorrectamente escritas las grafías analizadas, cuando la RAE, máxima institución garante de establecer los criterios de corrección en el uso de nuestra lengua común, ha señalado inequívocamente que eran palabras correctamente escritas", establecieron los jueces, consagrando en criterio de la Real Academia.
En esta ocasión, las palabras en disputa son stent, software y majorette. Se trata de tres de los cien términos que los opositores tuvieron ocho minutos para analizar. Es una prueba de carácter eliminatorio, por lo que algunos de ellos, al no llegar a la nota de corte, se han quedado fuera del proceso, al ser considerados "no aptos". Y no han podido continuar el proceso y acceder a la siguiente prueba, la psicotécnica.
Los opositores de la promoción 38 esperarán unos días más una respuesta de Interior. Si ésta no llega, iniciarán la vía judicial, como ya hicieran los de la promoción 36. Dan por hecho que la Justicia volverá a fallar en términos similares, con otro varapalo de la Justicia al ministerio de Fernando Grande-Marlaska.
"Vamos a esperar 15 días más para que el director general de la Policía Nacional conteste los recursos de alzada, cuyo plazo expiró desde el 24 de mayo. Si no los contestan de acuerdo con la RAE, cientos de recursos judiciales se presentarán un año más, una actitud por parte de Interior que sólo podemos calificar de irrespetuosa con los opositores, la RAE y los jueces", declara a este periódico Ángel Galindo, abogado de unos 300 opositores.
Adiós a la prueba
Se resuelva su conflicto en un sentido o en otro, la promoción número 38 será la última en sufrir el examen de ortografía. La Dirección General de la Policía anunció el pasado febrero que eliminará este polémico test en las próximas convocatorias, aunque esta materia se evaluará como parte de otra prueba.
Por contra, el letrado Ángel Galindo lamenta que se elimine. "No estoy de acuerdo en que se haya suprimido; creo que los futuros policías deben acreditar un conocimiento ortográfico relevante", reconoce.
"No es la finalidad de estos recursos acabar con la ortografía en los exámenes ni crear un coladero para que accedan personas que no saben escribir, sino que estas pruebas sean las adecuadas y se corrijan correctamente", sostiene el abogado.