Policías y guardias civiles salen a la calle para pedir a Sánchez el mismo trato que 'mossos' y 'ertzainas'

La protesta ha sido convocada por dos de las principales organizaciones que representan a ambos colectivos, la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) y el Sindicato Unificado de Policía (SUP).

Los portavoces de estas organizaciones denuncian que el Gobierno de Pedro Sánchez ha negado a los agentes sus "derechos fundamentales", por lo que creen que ha llegado el momento de que "tomen en serio" sus reivindicaciones.

Ley de Seguridad Ciudadana

Para reivindicar "los mismos derechos que otros cuerpos policiales", han organizado una nueva y multitudinaria manifestación este sábado 26 de noviembre por las calles de Madrid.

A la cita, según detallan fuentes de la organización, acudirán al menos 8.000 agentes que marcharán por el centro de la capital. La reforma de la Ley de Seguridad Ciudadana (conocida como Ley Mordaza), que prepara el Gobierno con el apoyo de sus socios parlamentarios, es una de las mechas que se han prendido en los últimos meses.

A juicio de los convocantes, el Gobierno de Pedro Sánchez está "desprotegiendo a los policías y guardias civiles" en el momento que más lo necesitan. Cuando llega el momento de la jubilación, la mayoría de ellos ven "cómo sus retribuciones descienden drásticamente, mientras esto no ocurre para sus homólogos en cuerpos policiales autonómicos y locales".

En la protesta denunciarán que el Gobierno ha incumplido todas las cláusulas del acuerdo de equiparación salarial firmado entre el Ministerio del Interior y sindicatos de Policía y asociaciones profesionales de la Guardia Civil hace ya cinco años.

[Miles de policías y guardias civiles claman contra Marlaska por la 'ley mordaza': "¡Dimisión ya!"]

"La derogación del delito de sedición, la rebaja en las penas a la mínima expresión, la sensación de desamparo institucional de guardias civiles y policías...", enumeran los organizadores, como motivos para salir a la calle. Policías y guardias recuerdan las pedradas que sufrieron en las numerosas protestas que tuvieron que cubrir en toda Cataluña a lo largo del último lustro.

"La ley que ahora se pretende reformar es una nueva pedrada, más dura todavía de encajar", lamentan. "Teniendo presente las imágenes del Piolín, nos preguntamos de qué ha servido el esfuerzo personal y familiar de cientos de compañeros alejados de sus familias durante dos meses". La siguiente "pedrada", dicen, llegará cuando se reforme la Ley de seguridad ciudadana.

"En pie de guerra"

"Los policías y guardias civiles son trabajadores esenciales a quienes, sin embargo, el Gobierno les niega derechos fundamentales. Los miembros de las Fuerzas Y Cuerpos de Seguridad del Estado son los únicos policías en España que no disponen de índices correctores en su jubilación", continúan desde SUP y AUGC.

Esto les provoca un menoscabo económico del 30% de media. Y así se ven abocados a trabajar hasta la edad de los 65 años. "Un mismo trabajo, un mismo salario, las mismas jubilaciones". Esa, dicen, es su legítima petición al Gobierno de Sánchez.

[Estupor en la Policía por los ataques de la izquierda caricaturizándoles como "represores" y "fascistas"]

Los agentes aseguran que mientras sigan desatendidas estas exigencias y reivindicaciones, los policías y guardias civiles continuarán en "pie de guerra" contra el Gobierno.

La manifestación arrancará a las 12 de la mañana en la Carrera de los Jerónimos, ante el Congreso de los Diputados. Allí los agentes denunciarán los "incumplimientos" del Ejecutivo en los últimos años. "Se olvida de los principales defensores de la libertad y de los derechos en España. Está obligado a explicarnos por qué nos abandona".

Los miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado suelen salir en las encuestas anuales como algunas de las instituciones más valoradas por los ciudadanos. Por ello, los organizadores consideran que el Gobierno no puede continuar ignorándoles: "No podemos seguir siendo discriminados y ninguneados por este Ejecutivo".

"Solo quieren a la Policía cuando la foto es buena —finalizan los convocantes de la protesta—, pero nos dan la espalda cuando hay que darnos una respuesta. Han convertido a los policías en funcionarios de segunda y nos han desprovisto de los derechos que otras policías ya disfrutan desde hace años".