En técnica jurídica el Gobierno anda flojo, pero en diseño de coreografías es un hacha.
Los jueces reconvertidos en ministros pesan bastante menos que los coreógrafos y los propagandistas en este gabinete. La operación rescate de políticos de Esquerra Republicana la va ejecutando el presidente cumpliendo, con diligencia primorosa, los pasitos de baile que tenía ya ensayados con la orquesta de Oriol Junqueras.
Es la coreografía de siempre. Dice Esquerra: hay que derogar la sedición y amnistiar a nuestros sediciones. Dice Sánchez: inaceptable, por dios. Dejémoslo en desórdenes públicos con alguna pena testimonial. Y dice el coro propagandista: alabado sea el presidente que para los pies a Esquerra y endurece el castigo por los desórdenes.
Dice entonces Esquerra: diluyamos la malversación para nuestros malversadores y fijemos una pena pequeña, de seis meses a máximo, tres años. Dice Sánchez: inaceptable, por dios. Dejémoslo en malversación bondadosa y en lugar de tres años, que sean cuatro. Y dice el coro propagandista: alabado sea el presidente que no traga con cualquier cosa. Ha parado los pies a Esquerra y endurecerá su enmienda.
"Donde había una pena de 8 años se queda en 4. Toda la vida se le llamó abaratamiento penal. No europeización"
Pero vamos a ver, criatura, que donde había una pena de hasta ocho años se va a quedar en cuatro. Toda la vida se le llamó a eso abaratamiento penal. No europeización. Ni concordia. Ni reencuentro.
Este fin de semana han quedado confirmadas todas las intenciones. La intención de disculpar la sedición, enterrándola. La intención de abatarar la corrupción, diluyéndola. La intención de resolver, tirando de ingeniería penal, la carga que arrastran, por haber hecho lo que hicieron, cargos relevantes de Esquerra Republicana que aún no han sido juzgados. Treinta y tantos.
Políticos resolviendo la situación penal a otros políticos. Éste, en última instancia, es el caso.
Y como ayer decía la crónica del El País, por supuesto que el motivo de todo esto no es jurídico. Qué va a serlo. Y por supuesto que es político: beneficiar a unos cuantos políticos. Políticos beneficiando a otros políticos.
He dicho intención, pero en breve será ya un hecho. Por la vía de urgencia, esta misma semana. Cuatro años gobernando y ahora le queman a Sánchez las prisas. Sin que digan ni media los órganos consultivos y sin más debate que el que tenga Sánchez consigo mismo.
El viernes se presentaron las enmiendas y esta misma semana se tramitan, se votan y aquí paz y después gloria. Qué audacia la del presidente, eh, así cuando lleguen las urnas de mayo estará todo olvidado: lo canta con fervor su coro de papagayos, ¡qué audacia, señor, qué audacia!, admitiendo que ni nada de esto era urgente ni merecía un procedimiento parlamentario jibarizado. Lo que le urge es que los votantes pierdan la memoria de aquí a mayo. La memoria democrática. Que en esto prefiere que no sea cultivada.
"A Sánchez le urge que los votantes pierdan la memoria de aquí a mayo. La memoria democrática"
Ya está aquí la desjudicalización, que en efecto significaba lo que Junqueras siempre dijo que significaba. Tantas semanas repitiendo el coro gubernamental lo de que urge homologarnos con Europa y bla bla bla, y ayer sale el presidente y admite abiertamente de qué va esto.
Sacar el debate político de los juzgados. Qué debate, cabría preguntarse, si a quienes van a ser juzgados no los ha llevado allí ser políticos, sino aprovecharse de que lo eran para cometer delitos.
Pero se entiende, ¿verdad?, lo que está diciendo Sánchez: no es sacar el debate político de los juzgados, es librar a unos cuantos políticos del juzgado por la vía divina de transformar el agua en vino; lo que era un delito como una casa cuando lo cometieron deje de serlo ahora que les toca pagar por ello.
¿Por qué? Porque son políticos. No se puede ser más transparente y más empoderado, que se dice ahora. Abracadabra: antes era delito, ahora ya no lo es. Desjudicialización le llaman a esto. Antes era corrupción, ahora ya no lo es. Porque son políticos.
Después de adelgazarles las penas, aún tendrá el presidente en su mano indultarlos en grupo. Ya, ya sé que el indulto es una medida de gracia individual y no cabe aplicársela a un colectivo, pero eso es justo lo que hizo Sánchez el año pasado, indultar al grupo de condenado del procés.
Con el silencio benefactor de la abrumadora mayoría del Partido Socialista, donde son cuatro gatos los que a estas alturas tienen criterio propio sobre las cosas, y de los tres jueces que son ministros del Gobierno y que avalan, con su estruendoso silencio, que se use el Código Penal (o su manoseo) para atender la situación personal de unos cuantos políticos.
"Tres jueces ministros avalan, con su silencio, que se use el Código Penal para una situación personal"
Ay, los tres jueces ministros. Tan vibrantes defensores, en otros tiempos, de que no se usen las reformas legales para casos concretos. Y tan sumisos, hoy, a la conveniencia que en cada momento marque su jefe.
Ah, y el ruido y la crispación siempre son los demás, por supuesto. El ruido siempre son los que discrepen de la palabra sagrada del líder que más veces ha cambiado su palabra en la historia reciente de España. Hoy se les llama ruidosos y nostálgicos de la confrontación. Tal como el año pasado se los llamó rencorosos y vengativos por discrepar de los indultos. La bondad, la virtud, la cordialidad siempre está en la posición que en cada momento tenga el presidente.
El presidente que más veces, y con peores coartadas, ha cambiado de posición en la historia reciente de España.
Manifiesto contra la reforma del Código Penal
La Asociación para la Defensa de los Valores de la Transición difunde hoy el Manifiesto contra la reforma del Código Penal al que se suman veinte fundaciones o asociaciones y más de trescientos firmantes del mundo de la cátedra, el derecho y la diplomacia. Dice este manifiesto:
- Que esta reforma no estuvo ni en el programa del PSOE, ni en el acuerdo de gobierno con Podemos, ni en el discurso de investidura.
- Que ni la Unión Europea nos ha exigido reformar el código penal ni es cierto que el objetivo sea homologarnos con Europa.
- Que lo ocurrido en 2017 no fueron meros desórdenes públicos sino un desafío al orden constitucional.
- Que desviar dinero público para actuar contra el Estado y la integridad territorial es más lesivo que el lucro personal.
- Que es una burla decir que el conflicto catalán se haya desinflamado.
Y que ante la perversión del derecho penal para beneficiar a unas pocas personas no cabe mantenerse en silencio.