Muere el piloto de una narcolancha al huir con 115 kilos de hachís de una patrullera en Barbate
Las patrulleras de la Guardia Civil y la Armada han realizado más de 600 avistamientos de estas embarcaciones en lo que va de año en el Estrecho.
9 junio, 2024 14:23Un ocupante de una embarcación recreativa dedicada al narcotráfico y que transportaba 115 kilos de hachís ha fallecido durante una persecución por una patrullera del Servicio de Vigilancia Aduanera (SVA) en la costa de los Caños de Meca perteneciente al municipio gaditano de Barbate (Cádiz).
Según ha informado el delegado del Gobierno en Andalucía, Pedro Fernández, durante la persecución la embarcación perseguida realizó "una serie de acometidas" provocando "varios impactos" contra la patrullera del SVA, cuyos agentes finalmente consiguieron detener y abordar la nave sospechosa de llevar droga.
En declaraciones a los periodistas tras ejercer su derecho al voto en Baza (Granada), Fernández ha detallado que uno de los ocupantes de la embarcación quedó dentro herido, mientras que el otro se lanzó al agua intentando huir aunque finalmente pudieron ser detenidos los dos.
Durante el traslado hacia el puerto de Barbate, uno de los accidentados, un tripulante marroquí que no portaba documentación, sufrió una parada cardiorrespiratoria sin llegar a ser posible su reanimación.
Un detenido
El otro ocupante de la embarcación, de nacionalidad española y con antecedentes por narcotráfico, fue llevado al hospital para ser atendido y recibió el alta, tras lo que fue trasladado a dependencias de la Guardia Civil de Algeciras (Cádiz), donde permanece detenido.
Tras el traslado a puerto de los dos individuos, otros medios navales del SVA han recuperado la embarcación utilizada para el transporte de la droga y cuatro sacos de hachís que han arrojado un peso de 115 kilos.
El pasado 9 de febrero dos agentes de la Guardia Civil perdieron la vida cuando fueron arrollados por una narcolancha que se había refugiado del temporal en el puerto de Barbate.
El narco vuelve a campar a sus anchas por el sur y en el Estrecho de Gibraltar, así como en sus alrededores. Las patrulleras de la Guardia Civil y la Armanda han realizado 558 avistamientos de embarcaciones go fast en la zona del Estrecho y la costa andaluza durante los cuatro primeros meses del año, según fuentes oficiales del Ministerio del Interior confirmaron a EL ESPAÑOL.
Estas lanchas rápidas, cuyo uso está prohibido en España desde 2018, son utilizadas habitualmente por las redes de narcotráfico para transportar droga desde las costas de Marruecos, aunque también se ha acreditado su uso, de forma más ocasional, para el traslado de inmigrantes irregulares.
Se trata de embarcaciones neumáticas rígidas o semirrígidas, de hasta 18 metros de eslora, que pueden transportar a 20 personas y 3.000 kilos de droga. Están dotadas con dos o cuatro motores de alta potencia, que consumen 50 litros de combustible cada hora. Pueden alcanzar una velocidad de 130 kilómetros por hora, lo que con frecuencia les permite darse a la fuga en una persecución.
Entre los meses de enero y abril, la Guardia Civil realizó 419 avistamientos de estas embarcaciones en la costa andaluza, utilizando también información suministrada por la red de radares SIVE, los medios de Vigilancia Aduanera (que depende del Ministerio de Hacienda) y las patrullas de la agencia europea Frontex que participan en la Operación Índalo.
Por su parte, las patrulleras de la Armada detectaron otras 139 veces la presencia de embarcaciones go fast. Durante los últimos meses, este cuerpo ha intensificado la vigilancia en torno a la isla de Alborán (situada a 85 kilómetros de la costa de Almería), tras detectar allí una creciente actividad de este tipo de embarcaciones ilegales.