La ministra de Defensa, en un acto este lunes.

La ministra de Defensa, en un acto este lunes. Matias Chiofalo Europa Press

España FUERZAS ARMADAS

Máxima preocupación por la misión española en Líbano: "Nadie está a salvo", dice Margarita Robles

Los cascos azules españoles suprimen las patrullas y "están encerrados en el búnker". Pese a ello, transmiten "tranquilidad" a la titular de Defensa.

24 septiembre, 2024 03:13

Los 650 soldados españoles integrados en los 10.000 cascos azules de misión de la ONU en la frontera de Líbano viven en tensión y en constante alerta la escalada de las hostilidades en los últimos días entre Israel y la milicia terrorista de Hezbolá. Las últimas horas están resultando decisivas y cruciales. Por el momento, han reducido su actividad y han suspendido las patrullas.

"No hay heridos por ahora, pero nadie está a salvo". La ministra de Defensa, Margarita Robles, manifestó este lunes su preocupación por la situación de los soldados de la Brigada Aragón, el nombre que recibe la delegación española del contingente de Naciones Unidas. Estos soldados se dedican a patrullar el sur de Líbano en la denominada línea azul, en la frontera entre ambos países, para vigilar el cese de hostilidades entre las partes. 

La ministra está al tanto de todas las novedades de la base Miguel de Cervantes, en la localidad libanesa de Marjayún. A diario le van actualizando la situación.  

Esta misma tarde del lunes Robles habló con el jefe de la misión integrada por 10.000 hombres, el general español Aroldo Lázaro. Eran conscientes de los intensos bombardeos que esperaban al inicio de esta semana. Por el momento, según la ministra, "están tomando todo tipo de medidas de seguridad".

"Tranquilidad"

Según Robles, la situación es límite porque hay muchos muertos, pero las tropas están "con la moral alta". "Han suprimido las patrullas, y están encerrados en el búnker". Pese a ello, destacó la ministra, "siempre" le transmiten "tranquilidad".

El ataque de Israel ha dejado más de 490 muertos y más de 1.600 heridos. Al mismo tiempo que se producían los bombardeos, el general Lázaro ha realizado una videoconferencia con la ONU, de quien depende el contingente. Todavía no hay novedades sobre la continuidad de las tropas sobre el terreno.

En las últimas horas, varios periódicos locales han hecho circular la información de que el personal civil de la misión estaría comenzando a guarecerse en un enclave alejado de la línea de fuego. Este extremo todavía no está confirmado por el Ministerio de Defensa.

Hace unos días, mandos del Ejército de Tierra ya advertían a EL ESPAÑOL. "Se avecina algo gordo", señalaban las fuentes consultadas.

Las tropas de esa misión de paz están atrapadas entre dos fuegos. El ataque sufrido en los últimos días por Hezbolá, según destacan los mandos militares, ha puesto en guardia una vez más a los integrantes del contingente. Hay cierta inquietud en la Base Miguel de Cervantes por la escalada.

Preocupación en el Gobierno

Tras estos últimos episodios, también fuentes del Gobierno desvelan a este diario su creciente preocupación por las tropas. Los soldados pasan mucho tiempo en los refugios acorazados, a salvo de los proyectiles de ambos bandos, pero la situación no hace más que agravarse.

Apuntan fuentes del Ejecutivo que el enfrentamiento se ha convertido en prácticamente un conflicto virtual, dado que el intercambio de cohetes y misiles desde los dos lados de la frontera, sobrevolando la línea azul, está a la orden del día desde hace meses.

Por el momento, dicen desde el Gobierno, no está previsto el repliegue de las tropas, un extremo que debería consensuarse con el resto de países de la misión. Aunque en estos momentos es el general Aroldo Lázaro quien ostenta el mando como Jefe de Misión y Comandante de la fuerza en la Fuerza Provisional de Naciones Unidas en Líbano, España no puede decidir extraer de allí a sus soldados de forma unilateral. La decisión la tomarían la ONU y afectaría a todo el contingente.

Eso sí, las Fuerzas Armadas ya han actualizado los planes de evacuación. Cuando se retire el destacamento, la retirada se realizará por vía marítima, ya que la milicia terrorista de Hezbolá no sólo controla el sur del país, sino que cuenta con un bastión que impide el acceso al aeropuerto de Beirut.

Este plan requerirá de apoyo por mar de las tropas de Naciones Unidas, principalmente para ayudar en el desplazamiento cuando se dé la orden de abandonar el Líbano.