El médico Jesús Aguirre (Córdoba, 1955) aparcó su jubilación para seguir en política. Pensó que ser consejero de Salud y Familias en el gobierno del cambio en Andalucía sería difícil, pero no tanto. En dos años ha sobrevivido a la alerta sanitaria por listeriosis, al virus del Nilo y, desde marzo, se enfrenta a la Covid-19.
Estaba preparado para asumir el cargo desde hacía años y cuando lo llamó el presidente de la Junta, Juanma Moreno, tenía prácticamente su equipo hecho. Fue senador del PP y, mientras el PSOE ocupaba el palacio de San Telmo, estuvo creando en la sombra y sin hacer ruido actual la estructura gestora de la sanidad andaluza.
En estos dos años ha sido el blanco de las críticas de la oposición, pero en el Gobierno andaluz no se han cuestionado su permanencia. Es uno de los consejeros más conocidos entre los andaluces porque "dice lo que piensa y lo dice como le sale", según su entorno. Eso en política tiene sus inconvenientes, pero le da frescura.
Se considera un médico muy vocacional y de fuertes convicciones religiosas. Su hermano Juan José Aguirre es obispo en Bangassou, una ciudad al sureste de la República Centroafricana.
Es consciente de que le quedan dos años duros de legislatura, después hará lo que su partido le pida y su familia le aconseje. Pero también de que va a ver con sus propios ojos cómo el coronavirus pasará a ser un mal recuerdo para el mundo. Y eso siempre le merecerá la pena. Entre reunión y reunión, hace un hueco en su agenda a EL ESPAÑOL y nos atiende vía online desde el Ayuntamiento de Córdoba.
¿Cómo afronta Andalucía el comiezo del año? Esta semana se ha registrado la cifra más alta de contagios del mes de diciembre.
Hasta ahora los datos demuestran que las decisiones tomadas por el comité de expertos el pasado 10 de diciembre fueron buenas porque Andalucía es la tercera comunidad con la menor tasa de incidencia del país. No sabemos aún el impacto que va a tener la Navidad, tenemos que estar ojo avizor y controlar ciertas variedades como la cepa británica.
¿Hay alguna novedad sobre los contagiados de esta cepa? ¿se han confirmado los siete casos que había en estudio?
La secuenciación genómica de la cepa tiene su tiempo, no es tan fácil. Tenemos dos hospitales trabajando y este método lo aprendimos en la alerta de la listeria cuando tuvimos que analizar cepa a cepa para saber si pertenecía a Magrudis.
Hay cinco casos confirmados, siete en estudio con alta probabilidad y cientos de casos bajo sospecha de que procedan de ella por la zona donde se han detectado. Todos se han mandado a secuenciación.
¿Teme una tercera ola en Andalucía después de las navidades?
Estamos preparando el escenario sanitario, como siempre hacemos, de una forma proactiva y nos vamos siempre al peor. Nuestro personal está perfectamente preparado por si llega y tiene un impacto de asistencia muy potente. Esperemos que no se produzca un aumento exponencial. No obstante, mi personal técnico vaticina que posiblemente tengamos un aumento importante de casos a lo largo del mes de enero.
¿Cómo están yendo las primeras vacunas? ¿Cuál sería el calendario de vacunación cuando terminen los primeros grupos?
Hacemos un seguimiento de todos los vacunados. Hasta el momento, alguno ha sufrido una reacción pero leve. Hemos tenido un caso de cefalea, un edema a nivel de cara o molestias en el brazo, pero el beneficio de la vacuna siempre es inmensamente superior. Todo está declarado en el sistema informático del Ministerio de Sanidad.
El calendario de vacunación viene determinado a nivel europeo y nacional. Ojalá tengamos a la mayor brevedad posible el suficiente número de vacunas como para crear una inmunidad de rebaño en una comunidad de 8,4 millones de personas. Confirmadas tenemos unas 840.000 dosis, que se traducirán en 420.000 personas vacunadas, un 5% de la población. El objetivo es que todos los andaluces estén vacunados el próximo otoño.
Sobre el reparto: ¿cuántas han llegado ya en la primera tanda?
Van a llegar 70.000 vacunas a la semana en las primeras ocho semanas del año, en las otras cuatro, hasta marzo, llegarán un poco más, más de 80.000. Pero estamos esperando vacunas de otros laboratorios. La siguiente será la de Moderna, que tiene una capacidad de generar anticuerpos del 94%, pero llegará más a cuentagotas.
Nuestra esperanza es que la carrera de los laboratorios por tener vacunas en el mercado repercuta positivamente para tener pronto la seroprevalencia más alta posible. Actualmente en Andalucía está en un 7,2%.
¿Qué opina sobre el primer rechazo de un familiar a vacunar a un anciano en una residencia y que la Fiscalía de Sevilla haya abierto diligencias?
Cuando una persona no tiene capacidad decisoria es el tutor el que tiene que dar el visto bueno para que reciba la vacuna. Es un tema personal en el que no entramos. Este caso es una singularidad, las personas mayores son las más sensibilizadas con la importancia de la vacuna, el rechazo es mínimo y la gran mayoría las recibe con mucha alegría.
Vacunarse es una obligación social, no puede ser una obligación legal. No hay jurisprudencia para ello. Pero tiene que serlo sobre todo para el personal sanitario y de riesgo.
¿Finalmente, los andaluces tendrán algún carné de vacunación donde rece que están vacunados?
No vamos a hacer una lista de buenos y malos. La vacunación es voluntaria, pero el personal sanitario que no quiera vacunarse tendrá que manifestarlo por escrito dentro de su libertad. Y aquel que se haya vacunado y que quiera tendrá su carné de vacunación cuando reciba la segunda dosis. Con un código QR podrá descargárselo y usarlo para lo que considere más oportuno.
¿Cuál será el funcionamiento y cuándo podrá recibir los primeros pacientes el Hospital Militar de Sevilla?
Hemos hecho más de 900 obras en infraestructuras sanitarias y una de ellas es el Hospital Militar. En una primera fase será un hospital auxiliar de Covid que contará con 27 camas de UCI y 170 convencionales y que dependerá del Virgen del Rocío. La segunda y la tercera se realizarán con otros presupuestos para poner al cien por cien toda su capacidad. Todo está preparado por si esta tercera ola supera a la segunda.
La contratación del personal sanitario como consecuencia de la Covid ha sido importantísima, con 12.000 contratos más. Ahora mismo no hay personal sanitario en bolsa. En el SAS trabajan 117.000 personas, de los cuales 5.000 son específicos para el coronavirus. Una parte de ellos darán la atención sanitaria en este centro.
Hace semanas que los sanitarios no convocan huelga, ¿cree que están más satisfechos con sus condiciones?
El abordaje del personal sanitario es una prioridad y se manifiesta en el Presupuesto andaluz. En el último año han conseguido la equiparación salarial con el resto de las comunidades, sobre todo en las horas de guardia y en nocturnidad, y se ha suprimido el complemento de exclusividad.
Ya no hay contratos basura y estamos intentando hacerlos lo más largos posible. También estamos inmersos en la oferta de empleo público más grande de la historia del SAS. Ahora estamos en un momento de tranquilidad sindical y centrados en atender a las personas que den positivo.
No sabemos lo que va a durar la inmunidad de las vacunas. Esperemos que sea la máxima. Si no, tendremos que vivir con vacunaciones periódicas
¿Cómo augura la próxima primavera con las suspensiones de la Semana Santa, Feria de Abril, el Rocío y las pérdidas en el turismo?
Vamos a vivir una Semana Santa y una primavera diferente. Tendremos que adecuarnos a la situación epidemiológica que tengamos en ese momento y en la próxima primavera no se va a llegar a un índice de inmunidad alto como para cantar victoria. La vacuna es el arma más efectiva.
Wuhan, un año después hace vida normal. Desde verano no detectan contactos locales ¿cree que aquí puede ocurrir lo mismo?
Espero que la información que llega de Wuhan sea lo más certera posible. Nuestra esperanza, que será una realidad, es que lleguemos a convivir con el virus como vivimos con otros. Tampoco sabemos lo que va a durar la inmunidad de las vacunas. Esperemos que sea la máxima. Si no, tendremos que vivir con vacunaciones periódicas.
Aunque sea el responsable de Sanidad, ¿cree que el Gobierno de Sánchez está gestionando bien el tema de las ayudas? Al final los hosteleros en Andalucía han comprendido las medidas, pero ¿qué le parece las ayudas aprobadas por el Gobierno para el sector?
En Andalucía hay muchos sectores que lo están pasando muy mal. Nosotros hemos seguido nuestro modelo, en el que la hostelería no se ha cerrado y se ha intentado compaginar la salud con la economía. Creo que medianamente lo hemos conseguido. El Gobierno andaluz, dentro de sus competencias, está dando ayudas que equivalen casi al doble de otras comunidades.
Nosotros hemos pedido al Gobierno que se implique de una forma más potente con estos sectores que están sufriendo tanto porque sus ayudas son insuficientes. Salvando estos sectores ahora, se salva con el tiempo la economía de Andalucía.
Llevan dos años de gobierno del cambio en Andalucía ¿cree que el tándem PP y Cs está funcionando bien?
Está funcionando con una cohesión impecable. En el Consejo de Gobierno yo no sé quien está a mi izquierda y a mi derecha. No sé si es del PP o de Cs. Nos ayudamos y remamos todos en la misma dirección y tenemos a Juanma Moreno en el timón, que nos da a todos mucha confianza.
El andaluz es un modelo a exportar y aquí funciona perfectamente utilizando el sentido común y llevando las cosas por su justo camino. También hay que agradecer a Vox, que nos apoyó en la investidura, porque entre todos sumamos. Hemos sacado tres Presupuestos en estos dos años.
En estos días es máxima actualidad política Cataluña. ¿Qué le parece el nuevo fichaje que ha hecho el PP con Lorena Roldán?
Es una cuestión de sumar. Ciudadanoss y el PP están trabajando de forma conjunta en múltiples comunidades y se ha hecho de formas diferentes. En algunas ha funcionado y en otras no. [Sobre Lorena Roldán] son decisiones personales y no voy nunca a entrar. Cada uno tiene su propio criterio.
Usted en los últimos meses ha tratado mucho con Salvador Illa, ¿qué le parece su elección para ser el candidato del PSC a la Generalitat?
No me ha sorprendido porque siempre tiraba mucho hacia Cataluña con una tendencia a beneficiarla. Las relaciones con Illa han sido fluidas, con respeto institucional, aunque hemos tenido grandes disparidades que se han solventado con diálogo. Le deseo que evolucione a nivel personal, pero quiero que gane mi partido.
Por último, cuando aceptó el cargo ¿imaginaba vivir dos crisis sanitarias de esta envergadura?
Yo sabía que iba a ser difícil, pero no tanto. Hemos tenido que lidiar con la alerta sanitaria de la listeria, con el virus del Nilo y ahora con la Covid-19. Pero este gobierno saldrá reforzado por cómo estamos abordando de forma integral y proactiva todo lo que nos llega.