Sevilla

El Consorcio Provincial de Aguas de Sevilla acaba de aprobar sus presupuestos para 2022, con los únicos votos a favor del PSOE. El documento establece, para el próximo año una suma total de 398.608,91 euros, un 0,48% más que en el ejercicio anterior. Lo sorprendente es que de esta cifra, 360.031,82 se dedican única y exclusivamente a gastos de personal. Los 37.042 euros restantes se reparten entre los 26.241,85 en bienes corrientes y servicios, 6.900 euros a gastos corrientes y unos pírricos 3.600 euros en inversiones... para toda la provincia de Sevilla.

El ente, creado en 2003, es sostenido económicamente año tras año por las aportaciones que realiza la Diputación de Sevilla (206.559,14 euros, el 51,82% del presupuesto); el Ayuntamiento de Sevilla (88.610,76 euros, el 22,23%); la Mancomunidad de Municipios del Aljarafe (36.951,04 euros, el 9,27%), y otros tres consorcios de aguas de varias comarcas de Sevilla, todos ellos controlados políticamente por el PSOE, como consecuencia de los resultados electorales en estos municipios.

La totalidad de los ingresos del organismo público proviene, por tanto, de aportaciones públicas. Las de este próximo ejercicio aumentan un 0,48%, si bien este incremento únicamente se aplica al gasto de personal, que acaba creciendo en un 0,43% con respecto al ejercicio anterior.

El Consorcio Provincial de Aguas de Sevilla está dirigido por una Junta General, presidida por el presidente de la Diputación de Sevilla, Fernando Rodríguez Villalobos (PSOE), y tiene como vicepresidente al alcalde de Bormujos, Francisco Miguel Molina (PSOE). La plantilla de 9 empleados la encabeza un gerente, Blas Ballesteros, y no sólo por desempeñar la gerencia, sino por su sueldo. 

Blas Ballesteros percibe 75.670 euros brutos anuales, entre retribuciones básicas y complementarias. Su sueldo supone el 19% del total del presupuesto del Consorcio y casi el 21% de todo el capítulo de Personal. Gana 6.426 euros más que el presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, que percibe 69.243,32 euros brutos al año.

Un histórico socialista

Blas Ballesteros es licenciado en Derecho y un histórico dirigente socialista de Sevilla que, tras un corto periplo en política municipal, ha ido encadenando desde 2003 puestos de trabajo a dedo en distintas empresas y Administraciones públicas controladas por el PSOE.

Entre 1999 y 2003, Ballesteros fue un polémico concejal de Tráfico en el Ayuntamiento de Sevilla con Alfredo Sánchez Monteseirín como alcalde. Al salir del Ayuntamiento, entró a trabajar en la Fundación NO&DO del Ayuntamiento de Sevilla, de donde pidió en 2007 una excedencia para trabajar como asesor jurídico en otra empresa pública, Emasesa, la empresa metropolitana de suministro de aguas y saneamiento de Sevilla.

Luego pasó por otra compañía de titularidad pública bajo control socialista: en 2012, en Aljarafesa, la empresa pública de gestión de inversiones, agua y medioambiente participada por los 30 municipios sevillanos del Aljarafe. A partir de 2015, recaló en la propia Diputación de Sevilla, ya como asesor.

Un año después, en 2016, concurrió a la plaza de gerente del Consorcio Provincial de Aguas de Sevilla. Fue la única candidatura admitida por la Diputación y entró cobrando 69.800 euros brutos. Su nombramiento no estuvo exento de polémica, ya que tanto el PP como Ciudadanos denunciaron que en las bases de la convocatoria se estipulaba el requisito de ser funcionario, y Blas Ballesteros no lo cumplía.

Tras el gerente, el capítulo de Personal se reparte entre los 31.000 euros brutos de los tres técnicos medios que componen la plantilla, los 22.478 que ganan las dos auxiliares administrativas, que perciben antigüedad y complementos aparte, y los 12.689 euros que ganan la interventora, el secretario y el tesorero del Consorcio.

Estos tres últimos, además, compatibilizan estos cargos remunerados con los que desempeñan como funcionarios de clase A en la Diputación Provincial de Sevilla. Además de los sueldos brutos, el presupuesto, al que ha tenido acceso EL ESPAÑOL, cuenta con un apartado de gratificaciones, que ascienden a 38.067,84 euros anuales.

Para el ejercicio de 2022, el capítulo de Inversiones, con esos 3.600 euros, se mantiene invariable con respecto a 2019 y a 2020. El pasado año las inversiones fueron 1.900 euros para maquinaria, instalaciones y utillaje; 1.000 euros para adquisición de mobiliario y otros 1.000 euros para equipamiento informático.

Un "chiringuito"

El secretario general del PP de Sevilla, Juan de la Rosa, ha criticado que el PSOE siga manteniendo el "chiringuito" del Consorcio Provincial de Aguas de Sevilla cuyo presupuesto para el año 2022 salió aprobado este miércoles con los votos en contra de PP y Vox, y los votos favorables del PSOE.

"Vemos cómo un año más el organismo público demuestra descaradamente lo que es: un chiringuito del PSOE que se dedica a contratar a afines del partido", ha reprochado el también portavoz del PP en el Ayuntamiento de Sevilla.

Además, el popular ha lamentado la ridícula partida dedicada a inversiones "que no supera el 0,001% del presupuesto total". La cifra de inversiones se sitúa en 3.900 euros, la misma que la del ejercicio anterior, lo que a juicio de Juan de la Rosa supone una "tomadura de pelo" del PSOE a todos los sevillanos.

"No se cortan en demostrar que se trata de un coladero laboral en lugar de un organismo con una verdadera utilidad pública y social", ha añadido ante la partida de inversiones. A todo ello se suma "la falta de transparencia" para explicar dicha cantidad. "La memoria se limita a decir se emplearán en atender las necesidades del Consorcio sin más justificaciones", ha reprochado.

"¿Este es el nuevo PSOE de Juan Espadas?", se ha preguntado Juan de la Rosa. "Ya vemos que no. El PSOE sigue siendo lo mismo con o sin Susana Díaz a la cabeza, y lo vemos con este Consorcio. Una organización que únicamente sirve para colocar a aquellos que tienen el carné del partido socialista".

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