Con un ojo puesto en lo que ocurra en las próximas horas en Castilla y León, donde las exigencias de Vox mantienen bloqueada la negociación para formar el nuevo gobierno, en Andalucía la relación entre ambas formaciones no pasa por su mejor momento.
Desde hace semanas, el portavoz de Vox en el Parlamento andaluz, Manuel Gavira, lleva recriminando al presidente de la Junta, Juanma Moreno, que quiera abrir espacios de diálogo con el PSOE-A, el partido de "la corrupción" en Andalucía.
Con esta postura, a su juicio, se certifica la opción del PP para estos meses de legislatura y para lo que suceda tras las elecciones, ha advertido Manuel Gavira en rueda de prensa. De hecho, ha remarcado que "la primera opción que tiene el PP es el PSOE".
Esta crítica hacia Moreno se ha acentuado después de que el pasado domingo dijera en una entrevista a El País que "se abre una etapa para el diálogo con el PSOE". Gavira ha insistido en que el presidente andaluz "sueña en socialista", en lugar de cumplir sus acuerdos con Vox, y su Gobierno se está dedicando a "gestionar la herencia" del PSOE-A en la Junta. Cosa que no les agrada.
También le ha lanzado otra advertencia sobre lo que queda de legislatura. Asegura que cada vez que el Gobierno lleve un proyecto de ley o decreto al Parlamento, lo analizarán y tomarán una decisión sobre si lo apoyan o no siempre teniendo en cuenta el beneficio de los andaluces.
En los últimos meses la estrategia marcada por Vox ha sido ofrecer y quitar su apoyo dependiendo de la iniciativa de la que se tratara. Votaron en contra de los presupuestos, pero a favor de la Ley del Suelo y han bloqueado varios proyectos de ley.
Para el PP, lo que ocurra en Castilla y León marcará su nuevo modelo de relaciones con este partido y puede tener una influencia decisiva en las elecciones andaluzas, previstas sobre el papel para el próximo mes de noviembre, pero que podrían adelantarse a junio.
Una línea roja
Moreno por su parte ayer marcó distancias hacia Vox. El Consejo de Gobierno de la Junta aprobó una declaración institucional a favor de la igualdad y aseguró que se trata de "una línea roja innegociable" y que no habrá pasos atrás. "Las mujeres han sido, son y serán partícipes fundamentales del progreso de esta tierra", aseguró.
Durante su intervención, Juanma Moreno presumió de estabilidad en su gobierno al poder celebrar el cuarto 8-M como presidente andaluz cuando al principio del mandato la izquierda le vaticinó una legislatura más corta.
Además, dio un paso más. Alabó la labor de la consejera de Igualdad, Políticas Sociales y Conciliación, Rocío Ruiz, muy crítica con las políticas sociales que Vox defiende y muy criticada también por esta formación.
De hecho, por la mañana, la consejera garantizó "el blindaje" por parte del Gobierno andaluz de las políticas por la igualdad y en materia de lucha contra la violencia de género en esta comunidad y dejó claro que lo que diga Vox a este respecto "no interesa nada".
Vox no participó en ninguna celebración por el 8-M y hoy ha criticado la labor del Instituto Andaluz de la Mujer (IAM) tras la emisión de un informe sobre la fiscalización de la Cámara de Cuentas de Andalucía (CCA) referida al ejercicio de 2018, cuando gobernaba el PSOE.
Gavira ha asegurado que el IAM concedió subvenciones "sin control" después de que el informe certifique que el citado organismo no siguió "adecuadamente" sus objetivos, señalando determinadas "incidencias e incumplimientos".
Además, avisa de que esperará a un nuevo informe de fiscalización para conocer si estas prácticas sobre las que ha alertado la Cámara de Cuentas se siguen produciendo o no en la presente legislatura con el Gobierno de PP y Cs.
Por último, el portavoz Manuel Gavira ha dado a conocer dos enmiendas presentadas a la PNL de Ciudadanos relativa al Día Internacional de la Mujer y que se debatirá en el pleno de esta semana. Son relativas a bonificar, aparte de otras medidas fiscales, a aquellas mujeres y hombres que quiera dedicarse al cuidado de la familia y al amparo por parte de la Administración a las mujeres que han trabajado en las explotaciones agrarias familiares y que no han sido reconocidas.
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